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Dos jueces contentos que no hicieron nada, nada

- Julio Nazareno, presidente de la Corte Suprema
“No voy a renunciar. ¿Por qué tendría que hacerlo? En definitiva ha terminado bien, pero no podemos estar eufóricos porque han desgastado ferozmente las instituciones, hirieron la Corte y politizaron el tema. La acusación fue absolutamente falsa. Sólo los cuestionamientos serios son motivos de juicio político, pero cuando se cuestionan sentencias, ambigüedades que dicen que usted es adicto a un sector, que ayuda a los corruptos, esas ambigüedades no son para un juicio político. Cuando usted sacaba el 13 por ciento decían que bombardeaba el Gobierno para negociar el juicio político y ahora dicen que se negoció la impunidad. La Corte no es un club de barrio, y si usted tiene 44 cargos, la suma de cero más cero es cero, y los pedidos de juicio político son gratis, pero tiene que probar las acusaciones. El pedido de juicio político es cosa juzgada, pero hay una discusión que continúa desgastando el juicio político, que es para casos excepcionales, como diciendo `ah... te perdonaron en esto, mañana te juzgamos por otra cosa’. Se deben serenar los ánimos, ¿qué gana Argentina con decir yo te voy a meter el juicio cuando tenga mayoría para que lo pierdas?”

- Adolfo Vázquez, ministro de la Corte Suprema.
“Tengo la conciencia tranquila. La votación estuvo absolutamente ideologizada. No puedo ser juez de mi propia persona, pero si así lo determinaron (los diputados) por algo habrá sido. Me siento herido de que dijeran que mi conducta contribuyó al descrédito del Tribunal. Tengo un enorme dolor. El doctor Bossert tendrá mucha fatiga moral y está contrariado de estar con nosotros, pero yo lo he visto constantemente alentándolo y halagándolo al doctor Nazareno. Bossert no firma nada con respecto al corralito, no firma nada con respecto a un montón de situaciones que hacen a la parte institucional. Hay gente que no quiere la propiedad privada y no perdona que la Corte haya restablecido las garantías de la Constitución que se establecieron el primero de febrero (último) en el caso Smith. Esa medida terminó con una ley de la que tengo mis dudas de si quienes la votaron no incurrieron en algún delito mucho más grave que el que se nos imputa a nosotros. (La votación en Diputados) fue absolutamente transversal, porque hay peronistas que votaron a favor y otros en contra y los de ARI y de izquierda obviamente votaron en contra.”

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