Desde Mar del Plata

La titular de Generación para un Encuentro Nacional (GEN), Margarita Stolbizer, encabezó ayer el encuentro nacional del partido que lidera con la presencia de varias figuras del centroizquierda no-K. “Este es el inicio de una gesta emancipadora y ética”, afirmó la dirigente en el gimnasio del club Quilmes del centro marplatense, donde intentó mostrarse como la articuladora de un potencial espacio progresista. Stolbizer cerró la jornada con una trabajosa foto junto al socialista Rubén Giustiniani, el radical Ernesto Sanz y la gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos.

En su discurso, la dirigente se diferenció de aquella oposición que tiene como único objetivo el combate a Cristina Kirchner. “No vamos a resolverles los problemas a la gente derrotando adversarios”, sostuvo Stolbizer, que reclamó en cambio “un enorme grado de generosidad y de grandeza para sumar a todas las fuerzas que tengan un horizonte de igualdad”. La titular del GEN también lanzó una advertencia a la oposición que se ausentó del evento: “La soledad es funcional a la preservación de los intereses de aquellos que han condenado a la Argentina”.

“La tarea fundamental es escribir un programa y discutirlo en el Parlamento argentino hasta el año que viene”, afirmó Giustiniani. El líder del PS pidió “no poner los cargos delante del caballo”. El titular de la UCR, Ernesto Sanz, lo siguió con un discurso furioso y enérgico. “Tenemos que confrontar a quien pretende adueñarse del pensamiento y las ideas progresistas, pero que esconde un conservadurismo corrupto”, exclamó Sanz, que terminó su discurso con una promesa. “Vamos a construir el proyecto para gobernar este país a partir de 2011”, aseguró el radical, no sin antes advertir que “con la UCR solamente no alcanza”. Ríos no habló en el cierre pero subió al escenario para la foto final.

El gran faltazo lo pegó el líder de Proyecto Sur, Fernando “Pino” Solanas, que media hora antes del acto central anunció que no asistiría, aunque en la mesa final le habían guardado lugar y micrófono. Otro de los grandes ausentes fue el cordobés Luis Juez. Sus voceros adujeron problemas de agenda, pero subrayaron su completo acuerdo con el frente propuesto por el GEN. Distinto fue el caso de Adrián Pérez y Diana Maffía, los dos invitados del partido de Elisa Carrió, que se bajaron a último momento sin mayores justificaciones. Stolbizer dejó en claro que su faltazo se debió a órdenes de la titular de la Coalición Cívica. “Adrián había confirmado, pero hubo un ‘ajuste’ –sonrío mientras imitaba con ambas manos el gesto de una llave tuerca–. Estoy segura de que él hubiese querido estar.”

El evento había comenzado a las 10.30 en la cancha de básquet del club, en medio de un clima ansioso y festivo. Unas seiscientas personas –militantes del GEN de provincia de Buenos Aires, en su mayoría– coparon el lugar desde temprano, venciendo el clima fresco e inestable de la mañana marplatense. Luego de unas palabras del titular del bloque de esa fuerza en Diputados, Jaime Linares, la jornada continuó con paneles a cargo de los principales invitados extrapartidarios. Fabiana Ríos evitó las definiciones tajantes y manifestó su voluntad de “discutir un proyecto de país”. “Lo que surja de esto, el tiempo lo dirá”, expresó la gobernadora. También estuvieron la ex ministra de Salud Graciela Ocaña y el dirigente de la CTA Víctor de Gennaro.

El viernes a la noche, horas antes del inicio del encuentro, los organizadores armaron una cena en el salón del club con todo el ambiente de una fiesta de quince. La titular del GEN improvisó una informal conferencia de prensa en una de las mesas donde resumió la apuesta de su partido de cara a 2011: “La presencia de nuestro partido en Buenos Aires, la del socialismo en Santa Fe y la de Pino en Capital”, además del Frente Cívico de Juez que su fuerza integra en Córdoba. La diputada se lamentó por las divisiones que signaron al Acuerdo Cívico y Social luego de las últimas elecciones. “Perdimos un año de tiempo”, expresó Stolbizer, que no ocultó su disgusto por el comportamiento opositor “cuando pierden energía en pegarle a Kirchner en vez de dedicarse a construir una alternativa”. Stolbizer fue interrumpida por un chico de unos quince años que se acercó, entusiasmado, para pedirle un autógrafo. “¡Margarita, Margarita!”, la saludó el joven, que pidió una dedicatoria para él “y para mis abuelos radicales”.

En el GEN esperan que, más allá de las ausencias, el encuentro haya servido como aglutinador de sectores progresistas no identificados con el oficialismo. “Queremos que nuestro partido cumpla el rol de facilitador”, explicó el diputado Gerardo Milman, que se mostró esperanzado en que “todos estos actores se puedan sentar y plantear una alternativa a Kirchner”. La intención de su fuerza es dejar que el radicalismo resuelva sus propias internas antes de plantear una alianza. “No tenemos por qué decidirnos por un candidato de otro partido político”, aclaró Stolbizer. Su objetivo de máxima será revitalizar el Acuerdo Cívico y Social, pero sin Elisa Carrió.

Informe: Federico Poore.