El PJ bonaerense parece finalmente encaminado a aceptar la conducción de Hugo Moyano en reemplazo de Alberto Balestrini. En diálogo con Página/12, el gobernador Daniel Scioli aseguró que no hay obstáculos para que el jefe de la CGT y vicepresidente del Consejo Nacional del partido asuma la dirección en la provincia. “No lo dije antes porque no me lo preguntaron”, dijo Scioli. “El partido tiene un orden institucional, que se debe seguir y se debe respetar en estas circunstancias; en este caso, tras la situación de Balestrini, queda a cargo el vicepresidente”. Scioli lo habló con Hugo Moyano, dijo, y con Néstor Kirchner. La primera reunión podría hacerse después de las vacaciones de invierno. Scioli le ofreció a Moyano el espacio de la residencia platense del gobernador, con una “comidita” para contemporizar los humores del encuentro.

“Hasta ahora no estaba prevista una reunión”, dijo Scioli. “Conversé con Néstor y con Moyano, y hablamos de las reuniones de las que yo participaba cuando estaba Balestrini, y en estas circunstancias también voy a estar porque estamos todos con la voluntad de mantener la gobernabilidad.” En alusión a lo que puede significar el impacto político de la asunción de Moyano en el sinuoso territorio bonaerense, Scioli aclaró enseguida lo que podría leerse como parte de un acuerdo. “Va a prevalecer la responsabilidad –explicó–, él es un hombre de mucha experiencia y tiene toda la buena predisposición de colaborar con toda la responsabilidad de lo que eso significa.” Agregó que el PJ no es “exclusivo sino inclusivo”.

Moyano es vicepresidente del PJ nacional y vicepresidente del PJ bonaerense. Hace un mes, convocó a los diputados nacionales bonaerenses a un almuerzo en la CGT para empezar a anunciarles elípticamente su decisión de asumir la conducción del Partido. “Balestrini es el que está en terapia intensiva, no el partido”, dicen que dijo. Poco después, Omar Plaini y Juan Carlos Schmid, de la mesa chica de la CGT, empezaron a hablar de la Carta Orgánica y el mandato para que él asuma la presidencia.

Desde entonces se negocia un acuerdo. La situación empieza a destrabarse, pero nada será lineal en las fogosas arenas bonaerenses. Varios intendentes y diputados le habían pedido a Kirchner directamente una intervención para frenar la avanzada de Moyano en el PJ. El líder de camioneros levanta históricas brumas por los contratos de recolección de basura, el avance en el gremio de los municipales y la corriente del peronismo sindical que amenaza el control de los barones en sus territorios.

Ninguno estuvo en el acto del 26 de julio por la muerte de Eva Perón, pero arriba del escenario empezaba a vislumbrarse el acuerdo, y el guiño de Kirchner para que Moyano avance y mueva el tablero, al que también sumó a la ministra Alicia Kirchner. Scioli lo venía conversando con Moyano, dice sobre una jugada que le evitó sumar costos políticos de un lado, y terminó obligando a alinear, al menos por ahora, a sus alfiles más refractarios a Moyano como el ministro Baldomero Alvarez, Isidoro Laso y Federico Scarabino.

Si todo sigue así, la reunión se haría a mediados de agosto. En ese contexto, se perderá la idea del cuerpo colegiado lanzada por un grupo de intendentes la semana pasada y con la que se intentaba un “no innovar” en el partido para frenar a Moyano. En ese sentido, una autoridad del PJ local recordó anoche un nuevo dato: en el Consejo están representadas buena parte de las corrientes internas del partido. Otro consejero agregó: “La pelea ahora se dará en ese ámbito porque Moyano no tiene la mayoría y le terminarán disputando el poder”. Y dijo: “Moyano podrá convocar o no, cada uno podrá hacer lo que quiera. Moyano no es Kirchner, se le puede decir que no”.

En el Consejo son muchos. Desde Aníbal Fernández, Florencio Randazzo, José Díaz Bancalari, más los intendentes de la vieja guardia: Hugo Curto (Tres de Febrero), Alberto Descalzo (Ituzaingó), Juan José Mussi (Berazategui), Mario Ischii (José C. Paz), Raúl Otacehé (Merlo) y hay que sumar al massismo y el bruerismo, representados por Malena Galmarini y Juan José Amondarain; el duhaldismo, con Mabel Müller, y dirigentes del kirchnerismo como José Pampuro, Alberto Pérez, Cristina Alvarez Rodríguez, Baldomero “Cacho” Alvarez y Laso, entre otros.

Moyano dijo que no va a ser candidato, pero su corriente intentará ubicar hombres propios.

Su avance cosechó el respaldo de Curto, que lo aprobó públicamente. El miércoles lo hizo Francisco “El Barba” Gutiérrez (Quilmes). Descalzo aseguró a Página/12 que “no hay una asunción, habrá una reunión del Consejo que preside Hugo, nada más, no es la idea de asumir o no, no da para tanto”. Para el kirchnerismo, se trata de mover el partido. “El peronismo venía desmovilizado –dijo Fernando “Chino” Navarro, del Evita– y está bien que se reorganice, que haya que convocar militantes y afiliar, el peronismo era una fuerza política que se hizo en la calle, no en un Congreso o parlamentaria, el partido es instrumento electoral, y lo que se hace es rescatar al partido como elemento, pero darle dinámica a un movimiento que a veces no se mueve.”