Los cancilleres de Paraguay, Argentina, Brasil y Uruguay, junto al presidente José Mujica.

Las largas boletas electorales para los comicios de 2011 tendrían un pliego más: la primera elección directa de 43 legisladores nacionales al Parlamento del Mercosur. En una nueva etapa institucional del organismo regional, el Parlasur implementará una conformación con representantes elegidos por el voto popular de sus países integrantes: Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay, y también se sumaría Venezuela. Un debate que el Congreso nacional deberá abordar contra reloj en los primeros días del año próximo, si se propone modificar a tiempo el Código Nacional Electoral para formalizar la convocatoria, que necesita mayoría calificada para su aprobación. La discusión se abrirá en plena campaña electoral y con tres proyectos que plantean propuestas diferentes.

Después de un trabajoso debate, el Mercosur estableció un sistema de “representación restringida” para transformar al Parlasur en una representación popular de todos sus países miembro y ya no sólo de los Estados que lo integran. La intrincada fórmula refleja la población de cada uno de los países, pero a la vez mantiene el delicado equilibrio en el que ninguno de ellos obtenga una superioridad que se transforme en poder de veto.

Así, la fórmula ya convalidada por todos los cancilleres del Mercosur establece 75 parlamentarios para Brasil, 43 para la Argentina, 18 para Paraguay y 18 para Uruguay. Incluso, también 32 para Venezuela si el Senado paraguayo aprueba –como ya lo han hecho los Parlamentos de Brasil, Argentina y Uruguay– la incorporación del país caribeño el organismo regional.

En busca de consolidar la nueva etapa institucional del Mercosur, el kirchnerismo intentará que la elección de los representantes al Parlasur se realice junto a las presidenciales de 2011. Con ese objetivo, el diputado K Mariano West –uno de los 16 legisladores argentinos designados en forma indirecta por el Congreso al Parlasur– presentó su propio proyecto en la Cámara baja. La propuesta de West establece una forma de elección mixta para los “Parlamentarios Mercosurianos”: 24 por cada uno de los distritos electorales –las 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires– y los 19 restantes tomando al país como distrito único, donde cada partido o alianza electoral presentará su propia lista de candidatos. La designación por distrito recaerá en la lista que salga primera en cada uno de ellos. Los otros 19 serán elegidos en forma proporcional, con sistema D’Hont y con un piso mínimo del 3 por ciento, como se exige para los diputados nacionales.

Uno de los apuros de West es que para implementar una elección que tenga a todo el país como distrito único debe coincidir con una elección presidencial. Si no se lograra en 2011, la elección de los parlamentarios del Mercosur quedaría postergada para 2015.

La modificación del Código Nacional Electoral en la Argentina también necesita de una mayoría calificada en el Congreso: la mitad más uno de los miembros de cada Cámara legislativa. “El debate está abierto”, dijo West a Página/12, sabiendo que para ser aprobado el proyecto deberá contar con un consenso amplio de la actual composición parlamentaria.

También habrá que avanzar en la discusión en el Senado, donde ya existen otros dos proyectos con orientaciones diferentes. Uno del senador oficialista José Pampuro, que propone la elección a través de listas partidarias o alianzas electorales –y el sistema proporcional D’Hont–, tomando al país como distrito único, aunque con algunas restricciones en su conformación, como que en los primeros siete lugares de las listas no se puedan repetir candidatos de un mismo distrito.

El otro es del peronista disidente Adolfo Rodríguez Saá. El senador puntano propone sólo una “representación federal”, los primeros 24 lugares para quienes triunfen en cada distrito y completar los restantes lugares con quienes hayan salido segundos. El problema es que el proyecto de Rodríguez Saá fue redactado antes de que se conociera la cantidad de representantes que tendrá Argentina, lo que dejaría renga la “representación igualitaria” para cada distrito: habría 48 electos para 43 bancas.