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El kirchnerismo tiene toda la atención puesta en las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias del domingo, “el escalón clave” rumbo a las elecciones generales de octubre. En la Casa Rosada creen que un resultado favorable en las PASO dejaría a la presidenta Cristina Kirchner en una situación ideal para encarar el último tramo de la campaña con “chances más que ciertas” de imponerse en primera vuelta. Con este objetivo en mente, el miércoles se llevará a cabo un acto de cierre de campaña en el Teatro Coliseo, donde la fórmula del Frente para la Victoria, que completa el ministro de Economía, Amado Boudou, se mostrará junto a los candidatos de esa fuerza en todo el país. Se descuenta la presencia a pleno del gabinete nacional, los gobernadores afines y las principales figuras del oficialismo en el Congreso.

Como se acostumbra hacer en el entorno presidencial, los preparativos para el acto del miércoles se están llevando a cabo en un hermetismo absoluto, y poco se sabe más que el lugar donde se llevará a cabo (se decidieron por el Coliseo, en pleno centro de la ciudad de Buenos Aires), la hora (el comienzo está anunciado para las 18) y, por supuesto, que CFK será la principal oradora. No se sabe, en cambio, si su compañero de fórmula hará a su vez un discurso ni cuál es la lista de invitados: la elección de un auditorio cerrado y con butacas para realizar el acto acota los lugares a repartir y le da a esta decisión (y a la ubicación que se le otorgue a cada uno) un valor político. Se espera que hoy se cursen las invitaciones.

De todas maneras, informalmente los gobernadores de mejor relación con la Presidenta ya están sobreaviso y volarán a Buenos Aires para estar el miércoles: desde el bonaerense Daniel Scioli hasta el chaqueño Jorge Capitanich, pasando por el sanjuanino José Luis Gioja, el tucumano José Alperovich y el entrerriano Sergio Urribarri, aquellos que deben competir aún por sus respectivas reelecciones y llevarán sus nombres en la boleta formarán parte del asunto. Es una incógnita la presencia o no de otros mandatarios provinciales cuyo vínculo con la Casa Rosada es oscilante, como el salteño Juan Manuel Urtubey o –principalmente– el recientemente electo gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, cuya asistencia daban prácticamente por descartada.

Además, se espera que participen las principales figuras de las listas K para diputados y senadores nacionales en todos los distritos, además de aliados políticos (la cúpula de la CGT tendría asientos reservados en las primeras filas, según pudo averiguar Página/12) y, como se acostumbra en los actos del Frente para la Victoria, un fuerte acompañamiento simbólico por parte de figuras del ámbito de la cultura y los derechos humanos.