Las rencillas entre el massismo del Frente Renovador y el macrismo del PRO después de aliarse para las elecciones legislativas del 27 de octubre se profundizan. “Queremos construir un espacio de centro”, señaló el diputado Sergio Massa después de caracterizar al PRO como “la derecha argentina”. El jefe del bloque de diputados del macrismo, Federico Pinedo, le contestó que “quiere diferenciarse de (el jefe de Gobierno porteño Mauricio) Macri, pero que en primer lugar debía tomar una definición acerca de su pertenencia o no al peronismo.”

“Tenemos la vocación de un sector importante del peronismo de convocar radicales, socialistas, progresistas e independientes, entendiendo que viene un nuevo tiempo que necesita la pluralidad como base de construcción política”, destacó Massa intentando mostrar diferencias de agrupamiento con el PRO. Los dos espacios políticos se consideran rivales en la carrera hacia 2015 y resaltan los puntos divergentes descartando, al menos por ahora, un acuerdo para las elecciones dentro de dos años. Desde el PRO apuntan contra la figura de Massa concentrando el centro de la disputa en el electorado común.

Los acuerdos y desacuerdos del PRO y el FR fueron la novela de las elecciones legislativas de octubre. Después de casi diez años conduciendo la ciudad de Buenos Aires, el macrismo no logró hacer pie en territorio bonaerense con sus precandidatos y finalmente optó por cerrar un acuerdo de baja intensidad con el massismo. Así metió tres candidatos a diputados de su partido en la lista encabezada por el ex intendente de Tigre que lograron ingresar en la Cámara baja. Sin embargo, apenas finalizada la votación, Massa comenzó a desprenderse del macrismo para no quedar “pegado” a la derecha y Macri hizo lo propio para no perder metros en la carrera presidencial con un posible competidor.

La primera reacción de los candidatos macristas que fueron en la lista del FR fue anunciar que no compartirían bancada con el massismo, por lo que les descontaron tres diputados y los sumaron a la que lidera Pinedo. Ese fue el punto que hizo mella entre ambos dirigentes, que antes de las elecciones se mostraban juntos y anunciaban el voto a favor del armado de Massa. Así lo había expresado en reiteradas oportunidades el jefe de Gobierno porteño, así como los principales candidatos de que presentó el macrismo en la ciudad de Buenos Aires.

“Creo que Massa quiere diferenciarse de Mauricio Macri, pero él tiene que definir si va a participar de la interna del peronismo o si va a presentarse como una alternativa diferenciada del peronismo”, señaló Pinedo al enterarse de las nuevas declaraciones de Massa. Los macristas le achacan al tigrense su pasado en el gobierno kirchnerista y su liderazgo en el Partido Justicialista de Tigre para marcarlo como “más de lo mismo” y quedarse con el lugar de “lo nuevo de la política”, como le gusta autodenominar a Macri a su propuesta.

Por otro lado, Massa explicó que “la idea es romper el mecanismo de péndulo que vive la política argentina que nos lleva a que vayamos de un lado al otro” y se mostró a favor de “tener una mecánica y una lógica mucho más humilde de no estar refundándonos cada diez años”. Massa se encuentra delineando la estrategia para birlarle al macrismo algunos distritos en el interior del país. Para eso ya anunció que recalará en la ciudad cordobesa de Villa Carlos Paz –provincia donde Macri se instaló como propuesta política con el ex árbitro Héctor Baldassi– para hacer campaña en los próximos días.