El ministro de Planificación, Julio De Vido, afirmó que “si como dice el fiscal Pollicita, la denuncia de Nisman es una ‘versión hipotética no demostrada’, la primera diligencia que debió realizar para dotarla de un mínimo grado de certeza y seriedad no era imputar a la Presidenta, sino por el contrario, tenía que buscar certeza en los antecedentes de los hechos y actos realizados por el Poder Ejecutivo”. El funcionario aportó, además, datos que desmoronan el argumento de la denuncia de que Argentina buscaba petróleo de Irán y señaló que de la fiscalía que conducía Nisman “nunca se me consultó a mí ni a ninguna de las áreas bajo mi dependencia sobre la matriz energética”.

“La realidad es incontrastable y no le da la razón al escrito de denuncia de Nisman”, apuntó De Vido en un texto, y agregó que “sería a esta altura oportuno saber si tiene sustento en alguna investigación concluida o en curso en la Fiscalía Especial AMIA”. El funcionario dijo que desde esa dependencia “nadie me consultó sobre si era necesario, dentro de la matriz energética argentina, contar con petróleo crudo iraní o cualquier otra inquietud vinculada con la supuesta factibilidad del intercambio de ‘grano por petróleo’. No hay ninguna crisis energética”. Además de explicar que “Argentina no necesita comprar petróleo crudo” y que “sólo importa menos del uno por ciento del total del petróleo procesado”, De Vido enumeró las “razones técnicas por las que de ninguna manera se podría comprar petróleo a Irán”. Entre ellas, citó el “alto contenido de azufre y la densidad del mismo” y su “inferior calidad” en comparación con el argentino.

En relación con la denuncia de Nisman, ahora impulsada por Pollicita, el Ministro de Planificación expresó que le resulta “indignante que esa ‘versión hipotética no demostrada’, que pudo haberse respondido rápidamente, se utilice para imputar a la Presidenta”.