“Estamos en presencia de cuatro responsables de falsedad ideológica”, dijo el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, en alusión a los miembros de la Corte Suprema que firmaron el acta de la re-reelección de Ricardo Lorenzetti, donde figuraba que el juez Carlos Fayt estaba presente e hizo propuestas en la acordada. Como se sabe, el magistrado de 97 años, sobre cuyo estado de salud y capacidad hay numerosos interrogantes, estaba en su hogar, adonde le fue enviada el acta para que la firmara. Fernández habló del tema en su habitual encuentro con periodistas al ingresar a la Casa Rosada. “Vaya si le han hecho cosas al Poder Ejecutivo, y siguió siempre la misma vía, presentando recursos, esperando los tiempos que nos marcaron”, agregó el funcionario.

En tanto, Graciela Fayt, hija del cuestionado ministro de la Corte de 97 años, afirmó que “la lucidez y brillantez” de su padre “no pueden ser puestas en duda”. La mujer enfatizó que Fayt está “muy bien de salud, de ninguna manera está postrado, está trabajando y es un hombre enormemente responsable”. La hija del juez agregó, en defensa de Fayt: “Se dicen tantas tonterías, está lúcido ejerciendo sus funciones, merece todo el respeto”, y pidió aprovechar la oportunidad que tenía al dialogar con los medios de comunicación para decir que es “proteccionista de animales” y que tiene “240 perros para dar en adopción”.

También se pronunció a favor de Fayt el abogado Jorge Rizzo, ex presidente del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, quien afirmó que “si se siente bien y sigue con vida” el ministro de la Corte “se va a quedar diez años más” en el máximo tribunal. En ese sentido, dijo que el juez “está bien, está entero, con ganas de seguir”, y que entiende que existe “una suerte de hostigamiento” en su contra. Rizzo manifestó que “un juez es un equipo, no es una persona, las sentencias son escritas por relatores, y es de estilo que los jueces firmen desde sus casas sus fallos”. Y citó el caso de la fallecida integrante de la Corte Suprema Carmen Argibay, que en el transcurso de su enfermedad “firmaba las sentencias desde el hospital o desde su casa”. Sin embargo, en esos fallos no se sostenía que la firmante estaba en donde no estaba.

Para el diputado nacional Carlos Kunkel (Frente para la Victoria), Fayt debería concurrir a la Comisión de Juicio Político de la Cámara baja para “demostrar que no son ciertas las versiones, que está en condiciones de ejercer su cargo”. El legislador kirchnerista opinó que “hay que invitarlo a la comisión para que venga, conversar con él, y mostrar que esas versiones no son ciertas”. A su criterio, “lo que está mal es que sea necesario hacer un reclamo institucional para que a alguien que dice que está ejerciendo plenamente sus funciones, se lo vea públicamente o en su lugar de trabajo, una vez al año por lo menos”. Dijo además que tiene la “presunción” que como el magistrado “no se expresa ante la ciudadanía, no dice lo que piensa ni se lo ve actuar, no está en condiciones de hacerlo, entonces alguien toma las decisiones por él”.

Fayt fue cuestionado en los últimos días luego de haber firmado una acordada de la Corte para la reelección de Lorenzetti como presidente de ese tribunal “sin salir de su casa”, pese a que se informó en un acta oficial que lo había hecho en la sala de situación del tribunal. “A partir de ahora el Poder Judicial queda muy cuestionado, falsificar un acto donde se eligen autoridades nueve meses antes no es actuar con seriedad”, advirtió Kunkel. Y así se manifestó en casi idéntica sintonía que el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

La titular de la Cámara de Casación Penal, María Laura Garrigós de Rébori, lamentó que los últimos “acontecimientos” de los que fue protagonista la Corte la están poniendo “en un lugar que no corresponde”, al evaluar que ese tribunal “fue lo mejor de lo que habíamos tenido en los últimos años”, en referencia a su desempeño a lo largo de la última década.