El ministro Daniel Gollan, el gobernador Jorge Capitanich, la presidenta Cristina Kirchner y el secretario Eduardo De Pedro.
Imagen: Télam.

La Presidenta se metió de lleno en la campaña con mensajes a propios y extraños. Desde el Chaco, donde inauguró junto al gobernador Jorge Capitanich un moderno hospital pediátrico, Cristina Fernández de Kirchner advirtió a los candidatos que disputan la presidencia que “esto no es para blandos, ni para tibios, ni para los que los corren con una tapa de diario”. Pero también, tras elogiar a Capitanich –que tras dos períodos como gobernador y su paso por la Jefatura de Gabinete ahora dará pelea por la intendencia de Resistencia–, lo puso como ejemplo, “puertas adentro y puertas afuera”, porque “para los verdaderos dirigentes políticos no hay cargos menores” y pidió “un baño de humildad” ante la proliferación de candidatos presidenciales y a la gobernación bonaerense en el oficialismo.

Tras inaugurar el Hospital Pediátrico Doctor Avelino Castelán, que conformará junto al Hospital Ferrando y un futuro hospital odontológico la “ciudad sanitaria de Resistencia”, la Presidenta dio una primera muestra del recorrido que seguiría su discurso político. Se explayó sobre la importancia de la obra inaugurada, junto a la llegada de las nuevas formaciones para el Ferrocarril Roca, y del regreso del ferrocarril a distintas zonas productivas así como el gasoducto que llegará al Chaco. “Estoy para agradecerles a todos ustedes, chaqueños y chaqueñas, el apoyo que siempre le dieron a mi compañero, primero, y a mí, después, que nos apoyaron en los momentos difíciles, que no bajaron los brazos, que no renegaron de nosotros, sino que por el contrario nos apoyaron y se enorgullecieron de pertenecer aquí, a este espacio político, a este modelo y proyecto de país”, sostuvo Cristina.

Al referirse al pabellón argentino en la Bienal de Venecia que inauguró en videoconferencia desde el Chaco, CFK describió una escultura, La Urpila: “Es una nena, una niña del país profundo, que va a Buenos Aires y termina arrastrando su carrito de cartonera”. “Representa este país que todavía nos duele en muchas partes, y por eso es necesario que este proyecto nacional, popular y democrático siga adelante profundizando el proceso de inclusión, para que las Urpilas del interior no tengan que ir nunca más a Buenos Aires con un carrito a recoger basura, sino que puedan ir como tantos otros argentinos a visitar nuestro querido país.”

“Recién Coqui, el gobernador, recordaba que ésta era mi décima visita a la provincia como presidenta, yo debo decir que he venido otras veces más no como presidenta, porque lo importante no es llegar como presidenta a una provincia solamente, sino visitarla también cuando sos un militante y nada más que un militante.”

El agradecimiento personal a dos chaqueños fue el disparador para meterse de lleno en la disputa electoral. El primero fue para el médico chaqueño Cristian Fuster, el jefe del departamento de neurología de la Fundación Favaloro, que la operó del hematoma subdural. “Cuando salí, obviamente una persona que tiene una intervención de esta naturaleza no puede salir a correr una maratón todos los días, como es la maratón de ser presidenta”, sostuvo Cristina Kirchner.

Luego lanzó una advertencia a todos los que disputan por sucederla en la Casa Rosada: “Porque te puedo asegurar, y pongan bien abiertas las orejas, todos los que quieran ser presidentes, hay que correr la maratón todos los días en este país, en nuestro país. Esto no es para blandos, ni para tibios, ni para los que los corren con una tapa de diario. Si piensan eso, hermanos, abandonen la carrera porque no llegan si no, porque hay dos formas de llegar: con la gente al lado, con la gente acompañándote, o con que te acarician los del poder. Pero está visto que cuando te acarician los del poder no llegás tan bien como cuando llegás con el pueblo”.

El otro agradecimiento fue para Capitanich. “No dudó un instante cuando le pedí si quería ser jefe de Gabinete”, dijo para también destacar su disposición para el trabajo y las horas que le dedica. CFK se sinceró de no haber confiado en él cuando en su momento disputó la gobernación del Chaco, pero enseguida ponderó la transformación que su gestión le dio a la provincia: “Hoy Chaco es otro, después de Jorge Capitanich”, sentenció.

“Después de haber sido dos veces gobernador del Chaco, después de haber recuperado el Chaco para nuestra fuerza política y haber hecho dos gestiones fantásticas, no tiene ningún problema y va a la intendencia de Resistencia. ¿Saben por qué? Porque para los verdaderos dirigentes políticos no hay cargos menores, hay responsabilidades superiores y eso es lo que tiene que primar en toda la dirigencia política”, continuó la Presidenta para luego señalar que “sería un buen ejemplo, puertas afuera y puertas adentro, porque parece ser que de presidente y gobernador nadie baja de ningún lado, que vean el ejemplo de este hombre que por su provincia, por su amado Chaco, vuelve a un lugar de laburo, porque si hay un lugar de laburo es precisamente una intendencia”.

Un ejemplo que CFK extendió también “a mis propios compañeros de la fuerza política, un baño de humildad, por favor, y una mirada más atenta, porque es legítimo, y esto pasa en todas las fuerzas políticas, no solamente en la nuestra”. Aunque consideró “legítimas” esas aspiraciones, pidió no sólo pensar que se está “capacitado para esa función” pero “que nunca olviden que además el resto de la sociedad también tiene que creer que es el más capacitado para esa función”. Un mensaje claro para empezar a ordenar la tropa propia ante la proliferación de candidatos presidenciales y más de una decena de aspirantes a la gobernación bonaerense en una elección donde el oficialismo juega la continuidad de su modelo sin su líder al frente de la boleta para garantizarlo.

“Por eso es necesario que todos tengamos esa mirada más amplia y colectiva, ese abandono de egos personalistas y si realmente creemos que esto es un proyecto colectivo, si realmente creemos que la Patria es el otro, tengamos esa actitud y contribuyamos todos con seriedad y responsabilidad a fortalecer el proyecto nacional, popular y democrático que ha permitido en estos 12 años transformar la vida de los 40 millones de argentinos, de todos los argentinos, porque no hemos hecho distinción”, concluyó Cristina.