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El Gobierno dispuso la intervención por 180 días del Fondo Compensador para Jubilados y Pensionados Telefónicos, luego de que una auditoría solicitada por el Ministerio de Trabajo determinara graves irregularidades en la administración y en el manejo de fondos. El Fondo Compensador estaba en manos del Foesitra, sindicato telefónico conducido por el menemista Rogelio Rodríguez, desde que la ex interventora de ENTel María Julia Alsogaray le transfiriera todos los cargos correspondientes a la empresa en el consejo de administración, incluida la presidencia. Con posterioridad a la privatización, Telefónica y Telecom siguieron pagando sus aportes (160 millones de pesos en cinco años) sin ocupar sus cargos en el consejo y desentendiéndose del control y fiscalización de la administración de los fondos.
Esta decisión oficial había sido anticipada por Página/12 el último domingo, cuando además se informó sobre las irregularidades que llevaron a tal determinación. La administración del Fondo Compensador y el sindicato Foesitra, por entonces adherido a la CGT Daer, habían sido denunciados en el 2000 por Foetra Buenos Aires, filial metropolitana que se escindió del gremio burócrata de Rogelio Rodríguez. En ese momento, el consejo de administración era presidido por el senador justicialista Alberto Tell, otro ex dirigente sindical del gremio telefónico. Tell quedó posteriormente involucrado en las denuncias por corrupción en la votación de la reforma laboral en abril del 2000, pero la Justicia lo sobreseyó al igual que a Néstor Cantarero, el autodenunciado Mario Pontaquarto y demás sospechados. Pese a la denuncia y las comprobaciones hechas por una auditoría ordenada por el Ministerio de Trabajo, ni la titular de la cartera en el 2001, Patricia Bullrich, ni sus sucesores durante la transición Duhalde, hicieron nada al respecto.
El Ministerio de Trabajo designó como interventor a Gerardo Gustavo Gentile, un especialista en temas previsionales. Todos los integrantes del consejo de administración “cesan en sus cargos” a partir de la resolución que ordena la intervención.
El Fondo Compensador Telefónico fue creado mediante un acuerdo celebrado en 1973 entre la entonces ENTel y los gremios Foetra y la Unión del Personal Jerárquico de ENTel, teniendo como finalidad primordial “otorgar un complemento de jubilación al personal pasivo”.
La nueva auditoría sobre el Fondo Compensador Telefónico, realizada entre junio y julio de este año, determinó, entre otras, las siguientes irregularidades:
u Pagos a la empresa Main Serv SA para servicios de informática por un millón cuatrocientos treinta y siete mil pesos. El objeto social de la mencionada empresa “no tiene ninguna relación con estos servicios”. Tal cual apuntó este diario en su edición del último domingo, “Main Serv se constituyó con el objeto de fabricar y comercializar artículos de limpieza, desinfección y fumigación, control y destrucción de plagas en explotaciones agropecuarias, limpieza y mantenimiento de edificios, y compraventa de inmuebles”.
u “Existencia de salidas de fondos no documentadas, alteraciones en las correlatividades y modificaciones manuales en la emisión de órdenes de pagos.”
u “La mayoría de las colocaciones de fondos se realizan en entidades privadas en violación al artículo 12 del régimen del fondo, que establece que la totalidad de los recursos deben ser depositados en bancos oficiales.” Entre éstos, un depósito de 14,5 millones de pesos en Cofirene Banco de Inversión SA, actualmente en liquidación.
u Salidas de dinero por 4,5 millones de pesos en concepto de “adelanto” a la Obra Social del Personal Telefónico (perteneciente a Foesitra), “en abierta violación a la prohibición del reglamento del Fondo a dar a los recursos del ente un destino distinto al que motivara su creación”.
u Pagos de servicios de auditoría por 1,6 millones de pesos sin respaldo documental.