EL PAíS
Bielsa, del Consejo de Seguridad a Palestina
El canciller argentino empezó su agenda de trabajo como titular del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Hoy viajará a Palestina, donde el domingo se realizarán los comicios tras la muerte de Arafat.
Desde la estratégica presidencia del Consejo de Seguridad, Rafael Bielsa ya empezó a lidiar con la compleja problemática internacional en la que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) interviene en forma directa. Pero la prioridad del canciller pasa ahora por las elecciones que el próximo domingo determinarán quién será el nuevo presidente de la Autoridad Nacional Palestina, tras la muerte de su lider histórico Yasser Arafat, un paso clave para la reanudación del proceso de paz en Medio Oriente. Hasta allí viajará Bielsa, quien se entrevistará, como enviado del gobierno argentino, con los presidentes y ministros de Relaciones Exteriores de los Estados palestino e israelí, además de participar junto a los veedores internacionales en el control de los comicios.
Después de presidir sendas reuniones del Consejo de Seguridad de la ONU, Bielsa viajará hoy desde Nueva York a Palestina, donde lo aguarda una intensa agenda. El canciller se reunirá primero en la ciudad de Gaza, y en nombre de la Argentina, con su par palestino Nabil Shaath y el presidente interino Rauhi Fattuh. Luego, en Ramalá, Bielsa se entrevistará con Mahmud Abbas, el actual presidente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), representante del oficialista y mayoritario Movimiento Al Fatah y principal candidato para suceder a Arafat. En la misma ciudad también tendrá un encuentro oficial con el primer ministro de la Autoridad Palestina, Ahmed Qureia.
El domingo, después de depositar una ofrenda floral ante la tumba del ex presidente y líder histórico de los palestinos Yasser Arafat, el canciller dedicará enteramente su actividad al control de los comicios, en los que según las estimaciones votarán un millón de personas. Bielsa concurrirá al Centro Electoral, que concentrará el resultado de los comicios en todo el territorio palestino, y varios lugares de votación donde mantendrá contactos con representantes locales, funcionarios de Naciones Unidas y veedores internacionales, entre los cuales también estará el observador enviado por el gobierno argentino, Carlos “Chacho” Alvarez.
Tras las elecciones en Palestina, el canciller argentino se trasladará hasta Israel, donde se reunirá con el presidente del Estado israelí, Moshe Katsav, y el ministro de Relaciones Exteriores, Silvan Shalom. Bielsa también visitará el Museo del Holocausto, que recuerda a las víctimas de la Segunda Guerra Mundial.
Aunque toda la gira del ministro será en representación del Estado argentino, su recorrida también tendrá la impronta de su investidura como presidente del Consejo de Seguridad de la ONU, que tendrá en su agenda durante todo enero –el mes que dura el interinato de la Argentina al frente del organismo– el tema de Medio Oriente entre sus prioridades.
A su regreso, Bielsa tomará en sus manos otro de los temas que la Argentina propuso en el Consejo: Haití. El 12 de enero se hará el debate abierto en el que se buscará que “la comunidad internacional adopte un enfoque comprensivo y abarcar las diferentes dimensiones de la actual problemática haitiana: seguridad, asistencia humanitaria, reconstrucción, derechos humanos, transición política, reconciliación nacional, justicia y estado de derecho”.
Al debate están invitados el propio secretario general de la ONU, Kofi Annan y su representante especial en Haití, el embajador chileno Juan Gabriel Valdés. Quienes ya comprometieron su participación son los cancilleres de Brasil y Chile, dos de los países que aportaron tropas a la Misión de Naciones Unidas de Estabilización en Haití (Minustah). La complejidad del tema y el estiramiento de los plazos originalmente establecidos parecen ser los principales puntos de cuestionamiento que llevarán al encuentro los representantes latinoamericanos.
En tanto ayer, la delegación argentina en el Consejo de Seguridad, encabezada por el embajador César Mayoral, manifestó su preocupación por “la falta de mejoría” sobre la situación de derechos humanos en la República Democrática del Congo por las violaciones de más de 100 mujeresy niños que habrían cometido las propias fuerzas armadas congoleñas, que ponen en duda el compromiso asumido por el gobierno de ese país.