Aunque amagó con retobarse, el tercer puesto en La Rioja no le dejó mucho margen de acción. Así que ayer, finalmente Carlos Menem –que estuvo junto a su hermano Eduardo– anunció en La Rioja su respaldo a la candidatura presidencial del reelecto gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá –acompañado en la ocasión por su hermano Adolfo–, por el peronismo anti K para las elecciones de octubre. De vuelta en San Luis, Alberto dio su primer discurso como aspirante a la presidencia y anunció que su candidato a gobernador bonaerense será el ex secretario de Industria, Alieto Gudagni. Del ex represor Luis Patti, quien se había autolanzado para ese lugar, no se conocía el destino.

Las definiciones dejaron al sector diezmado. Primero se alejó el neuquino Jorge Sobisch, que ratificó su propia postulación junto al ex embajador menemista Jorge Asís. Ayer, quien faltó a la reunión fue el misionero Ramón Puerta, que desde que Mauricio Macri no dio ninguna señal a favor de este sector parece haber perdido todo entusiasmo en el armado nacional y está concentrado en hacer un buen papel en la elección para gobernador de su provincia.

Los Rodríguez Saá llegaron ayer a la capital riojana junto al ex senador Eduardo Menem en un vuelo privado que aterrizó en el aeropuerto local minutos antes de las 15 y se trasladaron a la residencia que Carlos Menem ocupa en el Club de Golf, en la zona sur de la ciudad. Durante el encuentro, los capitostes del peronismo anti k se turnaron para repartir críticas contra el gobierno de Néstor Kirchner y asegurar que mantienen la tarea política de “refundar el país, procurando la reconciliación de los argentinos”, según dijo Adolfo Rodríguez Saá.

El senador puntano fue quien adelantó que recién la semana que viene se definirá el compañero de fórmula de su hermano. Enseguida, Menem explicó que su hermano Eduardo no sería el elegido para integrar la fórmula. “El Alberto” consideró entonces que el aspirante a vice debe ser “del peronismo, conocido, y sería importante que represente a alguno de los distritos más importantes del país”.

Quien se mencionaba como posible acompañante, la ex esposa de Felipe Solá, Teresa González,finalmente irá como candidata a vice de Guadagni en la provincia. Curiosamente, La Colorada González ya había sido tentada para ocupar ese mismo lugar, pero con Jorge Sarghini en la fórmula del lavagnismo.

Adolfo Rodríguez Saá se refirió a otra cuestión espinosa: con qué sello se presentarán. Según el breve ex presidente competirán con partido propio. “Si no nos permiten usar al Partido Justicialista formaremos el Partido Peronista, Lealtad Popular o 17 de Octubre”, mencionó, desplegando un rápido menú de opciones.

Cuando se reunieron en Potrero de los Funes, en San Luis, este sector disidente pretendió que el encuentro fuera reconocido legalmente como un Congreso del PJ Nacional cuando el partido se encuentra intervenido. La decisión fue avalada por un juez de San Luis, pero la conducción partidaria planteó su amparo en la justicia electoral capitalina y la Cámara Electoral acaba de avalarlo.

Cuando fue lo de Potrero de los Funes, el sector anti k lucía más compacto. Tenían en sus filas a otro gobernador como Sobisch y a Puerta, que les aseguraba llegada a su amigo e inquilino de su bulín en París, el jefe de gobierno electo Macri. Pero en los últimos encuentros Puerta no asomó la nariz. Ayer tampoco. Los Menem y los Rodríguez Saá lo justificaron porque “inicia su campaña a gobernador en Misiones”.