“Ahora está allá en el piquete”, le respondieron a Página/12 anoche en la casa de Julio Méndez, un productor rural de la localidad bonaerense de Tandil. Méndez, junto a su hermano Emilio, está procesado en una megacausa que investiga, entre otras violaciones a los derechos humanos, las cometidas en el centro clandestino de detención conocido como “la Quinta de Méndez” durante la dictadura. La esposa de Julio Méndez confirmó que estuvo el domingo en el multitudinario acto de Rosario, el lunes en una asamblea de autoconvocados en Gualeguaychú y ayer estaba a la vera de la ruta, en Tandil, defendiendo “los intereses del campo”.

La imagen de Méndez parado detrás de Alfredo De Angeli durante un reportaje que un canal de noticias le hizo el lunes pasado al presidente de Federación Agraria (FA) de Entre Ríos está al alcance de cualquiera en Internet. Allí se lo ve claramente –en segundo plano– mirando a la estrella de los piquetes rurales.

El titular de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Olavarría, Carmelo Vinci, precisó que “Méndez está procesado y en estos momentos tiene prohibido salir del país por el juez federal de Azul, Juan José Comparato”. “Si vos estás en un palco, detrás o al costado, es porque alguna vinculación tenés”, arriesga María Rosa Toncovich, concejal del Frente para la Victoria de Tandil. Según Toncovich, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Concejo Deliberante de esa ciudad del centro de la provincia de Buenos Aires, los Méndez eran los dueños de esa quinta y “aparentemente se la habían cedido a las fuerzas conjuntas”.

Página/12 intentó por varios medios preguntarle a De Angeli si conocía personalmente a Méndez y si sabía de la prohibición de salir del país que pesa sobre ambos hermanos. Este diario sí logró, en cambio, comunicarse con Méndez pero él no quiso dar ninguna información:

–Hola, buenas noches, ¿Julio Méndez?

–¿Quién habla? –respondió una voz masculina y enterado de que era requerido por Página/12 para saber si estaba participando del piquete agropecuario en Tandil, completó: “Acá atendemos personalmente, por teléfono no queremos hablar. Gracias, gracias”, cortó sin esperar respuesta.

De Angeli pasó por Tandil hace aproximadamente 20 días, en una de sus tantas paradas por los pueblos y ciudades del interior del país. En esa oportunidad, Méndez participó del encuentro encabezado por el dirigente de la FAA y después del acto del 25 de mayo en Rosario decidió ir –según su esposa, “por causalidad”– a Gualeguaychú. En ese momento se capturó la imagen junto al multimediático dirigente ruralista. Sin embargo, Toncovich cuenta que en Tandil Méndez prefiere mantener el bajo perfil, no es un gran productor y hasta ahora no participó de las reuniones que algunos autoconvocados tuvieron con funcionarios de la zona.

La causa en la que están procesados los hermanos Méndez está todavía en plena etapa de instrucción por lo que aún no se pidió la elevación a juicio. La concejal relata que en “la Quinta...” estuvo secuestrado el abogado Alberto Moreno, a quien asesinaron de un balazo cuando se escapó de ese campo de concentración.