EL PAíS
Para prevenir la mortalidad
Para el ministro de Salud, Ginés González García, la Ley de Salud Sexual y Procreación Responsable, sancionada el miércoles, permitirá desactivar la “bomba social” que representan los embarazos no deseados, especialmente en adolescentes, que son causa de “aproximadamente un tercio de la mortalidad infantil y casi la mitad de la mortalidad materna” en el país. Según el ministro, el embarazo en adolescentes, “sobre todo en menores de 18 años, está subiendo mucho, en especial en los sectores más populares”, justamente los que no tienen acceso a los métodos anticonceptivos.
“Distribuir información en la sociedad es quizás lo más democrático que uno pueda hacer”, definió el ministro de Salud. Se refería, justamente, a los sectores sociales que no reciben información sobre prevención de embarazos, y que si la tuvieran, no podrían acceder a los métodos anticonceptivos. González García calificó a la ley sancionada por el Senado como “muy justa”, ya que apunta a los sectores que “no tienen información y, además, no pueden acceder por falta de dinero a estos métodos”. “La discusión (sobre el tema) se da entre los sectores medios y altos de la sociedad donde cualquiera sea la idea religiosa, todos tenemos derecho a la información y acceso económico a estos métodos”, dijo el ministro.
Para el ministro, la puesta en marcha de la ley permitirá prevenir el embarazo de adolescentes. “En los hospitales públicos del interior del país uno se conmueve –describió– porque (la mayoría) son nenitas. Están reproduciendo la pobreza y la injusticia y están anticipando la mortalidad.” “Cuando se tiene una bomba social de esas características –advirtió–, hay que actuar rápidamente, enérgicamente.”