Los diputados de los dispersos bloques de centroizquierda avanzaron en dejar sus diferencias de lado y en acordar la conformación de un “espacio común” que imponga su propia agenda parlamentaria y tome distancia del Gobierno y de la oposición “seguidora de (Hugo) Biolcati”. Ayer por la tarde se reunieron en el Congreso legisladores de Solidaridad e Igualdad (SI), del bloque Encuentro Popular y Social –que incluye a socialistas K, los críticos de Libres del Sur y a Vilma Ibarra–, Claudio Lozano (Proyecto Sur) y Miguel Bonasso. Allí, unos 15 diputados comenzaron a trabajar en un proyecto sobre facultades delegadas, que harían público el lunes y que podría inclinar a favor del Gobierno la posibilidad de conservar el poder para fijar las retenciones a exportaciones de granos.

Todos los presentes coincidieron en que la prórroga de esas facultades –que busca el Gobierno– debe ser “muy precisa y acotada en el tiempo”, para que el Congreso recupere su poder de decisión sobre muchas de ellas y conserve un sistema de control de las que delegue. Incluso aprueban que sea “este Ejecutivo o el que venga” el que fije las retenciones a las exportaciones de granos. Una postura que los acerca a la posición del Gobierno y los distancia del resto del arco opositor, que se alineó con el reclamo ruralista de anular completamente esa facultad.

“Comenzamos a trabajar en un espacio más amplio en la elaboración de una agenda parlamentaria propia”, sostuvo Carlos Raimundi (SI). “Vamos a trabajar durante todo el fin de semana para tratar de llegar el lunes a un proyecto común sobre facultades delegadas”, agregó Lozano. “Estamos explorando, aun con nuestros matices, la posibilidad de alcanzar acuerdos”, afirmó Eduardo Macaluse (SI). El lunes será la rueda de prensa.