“El kirchnerismo o los ismos nunca existieron, porque nosotros pertenecemos a un espacio nacional y popular y procuraremos construir una alternativa para 2011 a fin de profundizar todo lo construido hasta ahora.” La frase que antecede, o al menos la afirmación que la encabeza, era impensable hace unos meses. Ayer la pronunció el propio Néstor Kirchner en su regreso en el conurbano tras la elección del 28 de junio. Fue en la Casa de la Cultura del municipio de Quilmes, donde lo acompañaron el gobernador Daniel Scioli y todos los intendentes de la tercera sección electoral y una buena parte de los diputados del oficialismo de origen bonaerense. La visita de Kirchner a la tercera sección electoral llevaba implícita varios mensajes cifrados: en el sur del conurbano el oficialismo le ganó a Unión-PRO. “Venimos a honrar el triunfo que hemos obtenido en esta tercera sección electoral”, lo explicitó Scioli. Kirchner también adelantó cuáles serán sus planes para el futuro: “Nos van a ver caminando de una punta a otra de la Argentina.”

La visita de Kirchner a Quilmes había sido organizada por el diputado Carlos Kunkel y el intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra. Titular de la Federación Argentina de Municipios (FAM), Pereyra suele hablar muy seguido con Kunkel: ambos son de Florencio Varela y se conocen desde hace años. Ayer, Kirchner le agradeció a Pereyra apenas comenzó su discurso. En el primer piso de la Casa de la Cultura quilmeña lo acompañaban los intendentes Daniel Di Sabatino, Darío Giustozzi, Mario Secco, Fernando Espinoza, Aníbal Regueiro, Fernando Gray, Alejandro Granados, Darío Díaz Pérez, entre otros. Al anfitrión, Francisco “Barba” Gutiérrez, le tocó dar la bienvenida. Entre los diputados se encontraban Kunkel, José María Díaz Bancalari, Graciela Giannettasio, Mabel Müller, Mariano West, Remo Carlotto, Dante Dóvena, Carlos “Cuto” Moreno, Luis Ilarregui, Adela Segarra, entre otros. También estuvo el vicegobernador Alberto Balestrini, quien lanzó una frase resonante. “Prefiero perder con mis convicciones que ganar una elección dejando los principios de Evita y Perón de lado”, dijo.