Alicia Kirchner terminó la tarde reunida con diez intendentes de la tercera sección. Gustavo Arrieta (Cañuelas), Mario Secco (Ensenada), Gustavo Sobrero (Lobos), Juan Carlos Mussi (Berazategui), Daniel Di Sabatino (San Vicente), Francisco “Barba” Gutiérrez (Quilmes), Enrique Slezack (Ensenada), Aníbal Regueiro (Presidente Perón) y Jorge Ferraresi (Avellaneda). Según dos de los presentes, el encuentro fue claro: Alicia les dijo varias veces que ella no piensa ser candidata a nada. Una de las preocupaciones de la ministra es cómo hacer para que las políticas nacionales lleguen a la gente, dijo. Que hay que organizar seminarios, talleres, reuniones. Según uno de los participantes, llegó a pedir autocríticas, en referencia al rol de varios intendentes en las elecciones del año pasado. A alguno no le gustó. Muchas de esas cosas que Alicia pide, explicó otro intendente, son cosas que viene pidiendo la tercera sección desde hace tiempo.

Antes de ese encuentro, cuando los militantes abandonaban el galpón, Gray parecía transpirado. No era para menos. Los intendentes estaban arriba, en una sala, esperando una reunión con la ministra. Abajo, daba vueltas Juan Carlos Plaini. Había llegado decidido a reunirse dos minutos al menos con los intendentes para saludarlos en nombre de Hugo Moyano, como parte de una política de acercamiento, de avances, una forma de hacer las paces después del acto del lunes pasado. Gray era el anfitrión de la casa y el encargado de convencer a los intendentes.