La interna radical copó ayer la Fiesta de la Vendimia en Mendoza. El senador y precandidato Ernesto Sanz se mostró entusiasmado por volver a su provincia luego de varias semanas de recorrida proselitista, mientras que Alfonsín aprovechó para mostrarse con su aliado local, el ex gobernador Roberto Iglesias, además del cordobés Mario Negri y el diputado Juan Pedro Tunessi, que lo acompañaron en la recorrida (foto). El dirigente bonaerense sostuvo que “es el último año del Frente para la Victoria” en el gobierno y que el radicalismo va a ganar los comicios de octubre.

“No creo que Ernesto haya dicho eso refiriéndose a mí. Es un hombre que está preocupado por el partido, no diría nada que pudiera dañar las chances del partido”, respondió Alfonsín cuando se lo consultó sobre los dichos de su competidor, quien pidió evitar “el voto de la nostalgia”. Sanz, por su parte, consideró “muy valioso” que la presidenta Cristina Fernández concurriera a la Fiesta de la Vendimia a la que calificó como “una fiesta del trabajo genuino”. “Para un hombre del interior cuesta mucho insertarse en Buenos Aires y Capital”, reconoció el senador mendocino, aunque se mostró confiado en estar “rompiendo cierto desconocimiento”. El vicepresidente Julio Cobos también participó del evento vitivinícola, aunque a diferencia de los otros dos candidatos no se encuentra en campaña por la interna del 30 de abril.