“Más allá de cómo se resuelva la disputa, nosotros seguimos preocupados por las implicancias globales del caso. Muy pocos países tienen los recuersos para hacer frente a estos fondos predatorios”, señaló ayer Eric LeCompte (foto), director ejecutivo de Jubilee USA. “Incluso si Argentina alcanza un acuerdo con los holdouts cuando expire la cláusula RUFO, el comportamiento extremo está legitimado”, advirtió la organización religiosa dedicada a temas de desarrollo, a través de un comunicado de prensa. A mediados de año, Jubilee USA presentó ante la Corte Suprema de Estados Unidos un escrito respaldando la posición argentina en la disputa con los fondos buitre.

“Popularmente se los conoce como fondos buitre, pero ésa es una denominación errónea. Son grupos predadores”, explicó LeCompte durante una entrevista de este diario. Jubilee USA considera que la decisión del magistrado Thomas Griesa, convalidada por el sistema judicial de Estados Unidos, “sentó un precedente a favor del comportamiento predatorio”. El directivo de la organización con sede en Washington considera que ese precedente “podría dificultar los procesos de reestructuración de deuda de los países pobres frente al comportamiento de los fondos predatorios”. Entre los países que podrían ser directamente afectados en el corto plazo figuran la isla caribeña de Granada y la república africana de Zambia. Ambos países tienen litigios en Nueva York con componentes muy similares a la disputa entre Argentina y los buitres encabezados por el fondo Elliott-NML Capital.