El presidente del Sindicato Unico de Trabajadores de la Construcción de Uruguay (Sunca), José Cáceres, confirmó ayer que las tareas en la pastera que construye Botnia “continúan paralizadas”. La reanudación de las actividades, estimó, depende de “las garantías de seguridad” que brinde la empresa. Ayer, el Sunca participó de una reunión en la cartera laboral junto con representantes de la empresa finlandesa y del gremio metalúrgico. Según dijo Cáceres, esperaban llevarse “la garantía del Ministerio de Trabajo de realizar inspecciones en la planta, por lo menos dos veces por semana”. Cáceres advirtió que “la magnitud de la obra y el peligro de las etapas en curso –montaje electromecánico y obra civil– ameritan estos controles”, ya que “es factible que sucedan accidentes”, debido a que son muchas las empresas que participan en estas actividades. El dirigente reconoció que Botnia “ajusta los plazos porque quiere que la planta esté funcionando en el tercer trimestre de este año” y que, por lo tanto, apuran a sus trabajadores, relajando así las medidas de seguridad.