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Damián Sánchez, de 20 años, fue asesinado a balazos por una patota que lo persiguió desde la salida de un local bailable hasta el lugar donde había dejado su auto, en Lanús. Su padre realizó la denuncia en la 5ª de Lomas de Zamora, aunque también intervino la 1ª de Lanús.

Según información policial, los integrantes de la patota, de entre 20 y 25 años, se apodan Pulga, Juampi, Chiqui y Lippi. Aparentemente los dos primeros fueron los que dispararon. Según testigos, la víctima había sido increpada y golpeada en el interior del boliche, en el centro de Lanús, y luego perseguida hasta el lugar en que había estacionado su vehículo. La pelea, a golpes de puño, se produjo en el boliche Crazy, de 25 de Mayo y las vías del ex ferrocarril Mitre, entre Damián y un grupo de amigos que lo acompañaba contra otro grupo de muchachos. Los investigadores creen que al salir del boliche, el joven fue atacado nuevamente por el otro grupo de chicos con el que se había peleado. Damián había ido a buscar a su novia para pedirle que lo acompañara a retirar el auto.

“Cuando estaba solo (sin el grupo), aparecieron, le dispararon en la pierna y él salió corriendo. Antes ya le habían robado sus pertenencias, como las zapatillas”, contó un vecino del muchacho asesinado.

En momentos en que Sánchez se encontraba junto a su novia y se dirigía a buscar su auto, estacionado en Fernández y Los Hornos, en el límite entre Villa Caraza y Villa Fiorito, la pareja fue abordada por dos de los agresores, que se movilizaban en una moto. Uno de los atacantes extrajo un revólver y efectuó varios disparos, al tiempo que la pareja comenzó a correr para huir de la agresión.

Sin embargo, Sánchez cayó muerto de un tiro en la cabeza sobre la calle Fernández, a unos 50 metros de Los Hornos, agregaron los voceros. “Lo corrieron y lo fusilaron”, indicó el vecino, que agregó que además de los que iban en la moto, otros agresores iban en dos autos más.