Pescadores de Bahía Blanca y efectivos de Prefectura Naval se enfrentaron en el puerto de Ingeniero White, donde los primeros intentaron reinstalar un corte de tránsito en el acceso al complejo portuario, lo que generó incidentes, unos 50 demorados y varios heridos. Además, durante los disturbios se produjeron destrozos en el edificio del consorcio portuario, seis automóviles y una capilla de la zona. Los pescadores reclaman subsidios y la reconversión de la actividad pesquera, ya que las aguas están contaminadas.

Si bien el abogado Leandro Gómez Talamoni logró que la fiscalía dispusiera la liberación de gran cantidad de las personas demoradas durante los incidentes, un grupo de manifestantes que fue arrestado en predios portuarios quedó a disposición de la justicia para ser interrogado.

Eduardo Defilippis, dirigente de la Cámara de Pescadores local, dijo que en la tarde del jueves fue tanta la violencia que “el puerto parecía la Plaza de Mayo en la salida de (el ex presidente Fernando) De la Rúa”.

“Fue la peor represión que viví”, relató el dirigente y destacó que hubo menores de edad heridos. Defilippis cuestionó al gobierno bonaerense por la falta de soluciones al reclamo de reconversión de los pescadores artesanales ante la contaminación de la ría (de Bahía Blanca) y señaló que “prometieron mentiras para descomprimir la situación”.

“Me comuniqué con el ministro de Asuntos Agrarios, Ariel Franetovich, y lo recontra puteé”, remarcó el dirigente. “Un día antes, Franetovich salió por Radio Universal a realizar promesas; parecía Papá Noel repartiendo regalos, pero doce horas después cambiaron la bocha”.

Los pescadores rechazaron un convenio con el Gobierno, debido a que no les otorgarían un subsidio de dos mil pesos a cada uno, sino que ese dinero debían destinarlo a reparar embarcaciones. El presidente de la Cámara de Pescadores, Pedro Santos, seguía detenido ayer en dependencias de Prefectura Naval a la espera de ser interrogado por la Justicia.

Los pescadores artesanales intentaron ayer reinstalar la protesta pese a que se había abierto una tregua después de trece días de corte de tránsito. Pero el intento por cortar nuevamente el acceso al puerto fue reprimido por efectivos de Prefectura, lo que provocó corridas, disparos y heridas de bala de goma.

Santos alcanzó a decirle a la prensa local antes de ser detenido: “Nos molieron a palos”. El comisario Abel Maggi explicó que tras los incidentes del mediodía con Prefectura, la policía provincial aportó 23 móviles y 120 efectivos para contener la situación. Además dijo que “por decisión de Jefatura de Gabinete, también actuó el grupo (de elite) Albatros”.

Varios pescadores y al menos dos agentes de seguridad sufrieron lesiones durante los disturbios, aunque ninguna de gravedad. También la sede del Consorcio de Gestión del puerto sufrió destrozos durante la protesta.