Un acusado de violación será sometido a una extracción compulsiva de sangre para determinar si fue responsable de que la víctima se contagiara el VIH. El fallo de la Cámara Nacional de Casación Penal se refiere a un hombre procesado por “abuso sexual con acceso carnal reiterado, en concurso real, con privación ilegal de la libertad, agravado por violencia”. La medida de prueba había sido ordenada por la jueza Inés Cantisani, pero el defensor oficial se había opuesto en nombre de los “derechos personalísimos” del acusado. Los camaristas advirtieron que el imputado “pese a saberse portador de una grave enfermedad, cuando sometía a la víctima no habría utilizado protección”.