En medio de los pedidos de juicio político, los dos jueces que votaron a favor del avenimiento, permitiendo la libertad de Marcelo Tomaselli, analizaban ayer jubilarse. Se trata de Gustavo Jensen y Carlos Flores, quienes vienen siendo criticados duramente, luego de que Tomaselli asesinara a Carla Figueroa el sábado pasado en General Pico, La Pampa, una semana después de haber sido liberado por haberla violado, crimen por el que pasó ocho meses preso. Según pudo averiguar Página/12, Jensen pidió licencia ayer, con vistas a jubilarse. Su colega Flores charló ayer sobre esta misma posibilidad también con el titular de la Suprema Corte de Justicia de La Pampa, Eduardo Fernández Mendía.

El brutal asesinato de Figueroa, de 18 años, ocurrió el sábado pasado, en la casa de la madre de él y donde la pareja vivía junto a su hijo de dos años. Rosana Muchiut vio cómo su hijo acuchillaba a su nuera. “Yo entregué mi hijo a la Justicia, me arruinó la vida y nunca le voy a perdonar lo que hizo”, dijo la mujer. Antes, describió la escena del asesinato: Carla le estiraba los brazos, como pidiendo ayuda, “mientras él la seguía apuñalando. El también me abre los brazos llenos de sangre y luego la acomodó en el piso y le siguió dando”. Muchiut es la única testigo.

La defensa de Tomaselli y Carla Figueroa habían acordado el avenimiento por el que la víctima de la violación perdona al violador si éste se casa con aquélla, si hubo relación previa. El juez de la Corte Suprema de la Nación Raúl Zaffaroni definió esta figura como “una pieza arqueológica del Código Penal”. El pedido fue negado en primera instancia y dos fiscales que investigaron la violación insistieron en que Figueroa no estaba en condiciones emocionales para aceptar el avenimiento y fue manipulada por la defensa de Tomaselli.

“Cuando voté en contra del avenimiento fue porque entendí que podía suceder una nueva situación de violencia, aunque nadie podía esperar algo de tal gravedad y lo rápido que se produjo, es decir, siete días después de la liberación del imputado”, dijo el juez Federico Pellegrino, que rechazó en primera instancia el avenimiento. Sin embargo, Jensen y Flores, integrantes del Tribunal de Impugnación Penal, desoyeron todas las advertencias. Por este motivo, diputados de distintos bloques pidieron juicio político por mal desempeño de ambos magistrados.

Si se jubilan, no serán enjuiciados ya que el sentido del jury es su destitución.

En declaraciones a la prensa local, Jensen dijo que el asesinato de la joven fue “absolutamente imprevisible” y sostuvo que el avenimiento “desde el punto de vista práctico, debería subsistir”. Jensen admitió que su decisión no fue acertada y pidió que en estos casos “los controles sean suficientes para garantizar la integridad de las víctimas”.