SOCIEDAD
Lo que la gotita pega, complica a los Belsunce
Una pericia revela que en los orificios del cráneo de María Marta había pegamento. Habrían intentado disimular las heridas.
Por Horacio Cecchi y Raúl Kollmann
El caso García Belsunce volvió a deparar sorpresas. En esta ocasión, una sorpresa crítica: peritos de la Asesoría Pericial de la Suprema Corte bonaerense, en equipo con la Universidad Nacional de La Plata, hallaron restos de cianocrilato en tres de los orificios provocados por los disparos en el cráneo de María Marta. El cianocrilato es un componente del pegamento conocido como “la gotita”, lo que indicaría que se intentó disimular la hemorragia. El dato es crítico en dos sentidos. El primero, porque el informe llegó un día antes de que venciera el plazo que tiene el fiscal Diego Molina Pico para pedir la prisión preventiva o la libertad de Carlos Carrascosa, único detenido en la causa. Según confiaron fuentes del caso, la pericia borró las dudas del fiscal y “es un hecho que pedirá la preventiva”. Pero, además, la prueba resulta también arrasadora en las acusaciones por encubrimiento agravado. Para colmo, ayer, la Cámara de San Isidro rechazó el pedido de nulidad de las indagatorias de los nueve imputados de encubrimiento y la solicitud de Carrascosa para ser considerado particular damnificado.
La sorpresa fue mayúscula. Incluso dentro del equipo que rodea a los familiares de María Marta. La pericia, realizada por dos equipos de científicos muy prestigiosos, y con la participación de peritos de la defensa, concluyó con un informe drástico para el futuro del viudo célebre, acusado de homicidio y, por cuerda aparte, de encubrimiento agravado junto a otras ocho personas, entre ellas, Guillermo Bártoli y Horacio García Belsunce, cuñado y hermano de la víctima, respectivamente.
Peritos de la Gendarmería habían realizado una pericia semejante pero hallaron restos de estroncio y de plata. Ningún otro elemento por el simple motivo de que no lo tenían en el pedido. Como informó Página/12, el estroncio es componente del shampú Henna Egipcio. La plata, de las patillas de los lentes de María Marta. Pero hace 45 días, a pedido de la defensa, la empresa productora de La Gotita, Acapol, informó que el estroncio y la plata no son componentes del pegamento, pero sí el cianocrilato. Los peritos buscaron el compuesto químico en los tacos obtenidos como muestra y descubrieron que el reactivo daba el color azul, indicando la presencia de dicho elemento.
Fuentes de la Asesoría señalaron a este diario que el cianocrilato es utilizado habitualmente para pegar los ojos, la boca y en ocasiones las heridas de los muertos. Pero que esa preparación corre por cuenta de las funerarias. Los investigadores deberán determinar quién se encargó del preparativo. En el caso de María Marta, los empleados de la funeraria que concurrieron al chalet del Carmel declararon que la familia les había impedido preparar el cadáver y que, por ese motivo, el trámite demoró mucho más de lo esperado. Incluso, al realizarse la autopsia, los forenses descubrieron que la cabeza de María Marta estaba envuelta con una toalla que se encontraba pegada a la piel. De ser cierto, todas las sospechas quedarán concentradas pura y exclusivamente sobre los familiares, incluido el propio Carrascosa.
Aunque el plazo de que dispone el fiscal para pedir la preventiva de Carrascosa vence mañana, sábado, una fuente judicial confió a este diario que “con el informe pericial, el fiscal ya está decidido. Hoy pide la preventiva”. Si el informe puede volcar la balanza drásticamente contra Carrascosa, es mucho más contundente y arrasador en la causa por los encubrimientos. Por otro lado, el pedido de Irene Hurtig de que no se le extraiga sangre generó muchas sospechas. Irene presentó el escrito sosteniendo que el juez Diego Barroetaveña ordenó la extracción a imputados o sobre quien pese sospecha grave. No es su caso, por el momento. Pero fue la propia familia la que se ofreció a las extracciones. Su postura es contradictoria con la presunta idea de resolver el crimen. Puede haber razones lógicas, pero si no tuvo nada que ver, ¿por qué debería aparecer su ADN en las muestras?