La Cámara Primera del Crimen de Bariloche otorgó el beneficio de prisión domiciliaria a Melisa Fusiman, la joven de 23 años que dio a luz a su bebé en una letrina, donde murió, hecho por el cual está acusada de homicidio agravado por el vínculo. La mujer que estaba detenida en la cárcel local mantendrá prisión domiciliaria “con seguimiento permanente del equipo de Salud Mental del Hospital Zonal y del área de Desarrollo Social”. Fusiman es vecina de una toma del barrio Vivero y el 17 de mayo último tuvo al bebé en la letrina de su casilla, donde murió. Tras el hecho, el juez Ricardo Calcagno ordenó su detención. La excarcelación había sido solicitada por la abogada de la mujer, Natalia Araya, quien debió recurrir la medida ante la denegatoria de Calcagno, y ahora la Cámara Primera la concedió “parcialmente”, sobre la base de los peritajes psiquiátricos que demostraron inestabilidad psíquica de Fusiman.