Un adolescente fue asesinado de un balazo en el pecho al intentar resistirse a que lo asaltaran, cuando se dirigía a tomar la combi para ir al colegio, en la ciudad bonaerense de Salto. El cadáver de Rubén Ramírez, de 14 años, fue hallado alrededor de las 7.30 en la calle Pancho Sierra, cerca del Cementerio Municipal. El cuerpo, boca abajo y en medio de un charco de sangre, fue encontrado por un empleado del cementerio, que inmediatamente se comunicó con la comisaría local. Poco después llegaron efectivos de la policía, que constataron que el joven había fallecido por un disparo en el tórax. El muchacho había salido temprano para tomar el transporte que lo llevaba a la escuela agrotécnica en la que cursaba sus estudios. De acuerdo con el relato de las fuentes, la principal hipótesis con la que trabajaban los investigadores es que al menos un delincuente lo abordó con intenciones de robo, que el joven pudo resistirse y, en esas circunstancias, fue baleado. El jefe distrital de Salto, Sergio Barceló, confirmó que se investiga si el o los delincuentes le sustrajeron un teléfono BlackBerry cuando se dirigía “a tomar la Trafic que lo trasladaba a la escuela, como lo hacía todos los días”. “Estamos tratando de establecer si tiene algún vínculo una sustracción de una moto a metros del lugar donde fue encontrado el cuerpo”, dijo el comisario. En tanto, el abuelo de la víctima, llamado Focracio, indicó que “Rubén no llegó a encontrarse con sus compañeros porque faltaban ochenta metros cuando fue atacado”. “Estos chicos (por los delincuentes) venían de delinquir por la zona. Si bien es extraoficial, habían robado una moto y se encuentran con este chico (su nieto), lo increparon, le sacaron el celular y le pegaron un tiro”, contó. “Encontré a mi hijo muerto como un perro, por un celular, a tres cuadras de mi casa”, indicó entre lágrimas el padre del adolescente asesinado, mientras se velaban los restos del chico en una casa fúnebre de la ciudad.