Poco después de que el director nacional de Epidemiología, Jorge San Juan, afirmara que “sólo se ha detectado un caso no autóctono (de zika)”, un nuevo caso fue informado en Neuquén. El segundo caso de zika también es importado de Colombia, igual que el primero, que fue informado en CABA. El zika se transmite a través del mosquito Aedes aegypti, igual que el dengue, y tiene como síntomas dolores corporales y fiebre, aunque también puede presentarse de manera asintomática. Se trata de un virus que está relacionado a casos de microcefalia en bebés cuyas madres se contagiaron en los primeros meses de embarazo. La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, pidió a los países de la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) una estrategia regional de combate al zika y anunció una reunión de ministros de Salud en Montevideo el próximo martes.

El segundo caso confirmado se diagnosticó en Neuquén, a un hombre que contrajo el virus cuando estuvo de vacaciones en la Isla de San Andrés, en Colombia. El paciente, José Luis Canovas, fue atendido por médicos del Hospital Castro Rendón y se recupera favorablemente. “Por más repelente que usabas, los mosquitos te devoraban igual”, comentó Canovas. “Cuando llegué a Neuquén me broté, es un brote superficial, muy chiquito como un sarpullido en los brazos y me dolía mucho la cabeza y los ojos. Fui al hospital, expliqué todo y la doctora se puso a averiguar”, relató el hombre. “Lo único que podés tomar es paracetamol y esperar y se va solo”, explicó el hombre al que se le recetó un analgésico y debió hacer reposo durante ocho días.

El infectólogo Eduardo López, que trató el primer caso de Zika confirmado en Argentina en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, en CABA, informó que la paciente llegó de Colombia “con bajos riesgos de contagio”. El médico precisó que la mujer tiene 23 años, comenzó con síntomas el 2 de enero cuando viajó a Colombia para visitar a su familia y llegó a Buenos Aires tres días después, por lo que consultó primero en una institución privada y fue derivada al Gutiérrez por ser un centro de referencia en este tipo de virus. López indicó que la paciente “no estaba en el período epidémico y no estaba en riesgo de comenzar un ciclo” de circulación de la enfermedad. Además, explicó que la mujer “estuvo aislada en su domicilio y ahora ya hace su vida normal” por lo que su caso “no aumenta el riesgo de circulación pero sí es para mirar con atención”. El médico aclaró que, de todos modos, se le hicieron los estudios de laboratorio correspondientes y estimó que entre hoy y el mañana se tendrá confirmación oficial si tenía o no el virus. López recordó que el zika “no es mortal pero está asociado a malformaciones en el feto, menos cantidad de células cerebrales en el bebé, que nace con la cabeza chica o microcefalia”. En ese sentido, destacó la gravedad del avance de la enfermedad en Colombia donde se proyectan 500 mil casos de zika este año.

En Brasil se confirmó que, desde octubre, murieron 68 bebés con microcefalia de un total de 4180 casos sospechosos de padecer esa malformación congénita vinculada al virus zika. En ese sentido, el juez Jesseir Coelho de Alcântara, del tribunal de Delitos Dolosos contra la Vida de la ciudad brasileña de Goiania, señaló que la ley permite, en casos severos de microcefalia, la interrupción del embarazo. La malformación, que impide el desarrollo del cerebro y deja secuelas para toda la vida, causó la muerte tanto de bebés recién nacidos como de otros aún en gestación. El aumento de casos notificados identificado en una semana fue del 7 por ciento, mientras que la cantidad de casos descartados creció un 63 por ciento, según indicó el Ministerio de Salud de ese país.

Ayer, las autoridades sanitarias de Dinamarca confirmaron el primer caso de una persona infectada por el virus en el país. Se trata de un joven que estuvo de viaje por Centroamérica y Sudamérica que fue internado en el Hospital Universitario de Aarhus, en el oeste de Dinamarca.