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En la ciudad de Santa Fe, un estudiante universitario de 24 años denunció que fue expulsado violentamente de una disco junto a su pareja homosexual por el simple hecho de haberse besado. En el caso tomó intervención la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia y también el Instituto Nacional contra la Discriminación (Inadi). “Lo que pretendemos es que el boliche nos dé una disculpa formal. Nos hemos besado en otros pubs, pero nunca nos había pasado algo así”, contó el joven a Página/12.
Según la denuncia radicada en la Secretaría de Derechos Humanos de Santa Fe, el episodio ocurrió el 22 de abril, aunque recién trascendió ayer. “Estábamos bailando en el boliche Club Brava junto a un grupo de amigos, la mayoría heterosexuales, cuando mi novio me dio un beso. Entonces aparecieron dos tipos de seguridad y nos sacaron del lugar a los empujones. Fue humillante. El hecho no pasó a mayores porque no nos resistimos”, relató José, que prefirió un nombre ficticio y reservar su identidad. La disco está ubicada en plena Recoleta santafesina.
Desde la Secretaría de Derechos Humanos, encabezada por Domingo Pochettino, citaron a los dueños del local para que hicieran su descargo. “Pero nunca se presentaron”, informó el funcionario del gobierno santafesino. Ante esa situación, Pochettino decidió elevar la denuncia al Inadi. “Es la primera vez que recibimos un caso de estas características”, comentó a este diario Esteban Llamosas, vicepresidente del organismo nacional.
Los dos muchachos son estudiantes universitarios, viven en la ciudad de Santa Fe y están en pareja hace más de un año. Uno tiene 24 años y el otro 22. Llevaron adelante la denuncia con el acompañamiento de Vox Asociación Civil, una entidad rosarina que lucha por la defensa de los derechos civiles de las minorías sexuales. “No volvimos nunca más al lugar. Pero ese boliche nos gusta y creo que tenemos derecho de ir. ¿Por qué vamos a estar cuidándonos de tocarnos o darnos un beso?”, se preguntó José. Guillermo Lovagni es el presidente de Vox: “Si hubiera pasado en una disco de Rosario me hubiese sorprendido, pero en Santa Fe no, porque es una ciudad muy homofóbica, la discriminación hacia los homosexuales ahí es de terror”, dijo a este diario.
Los denunciantes aclararon que no se presentaron en la Justicia, porque “lo único que pretendemos es que el boliche nos dé una disculpa formal. No sólo fuimos atacados moralmente sino también físicamente y nos tienen que pedir disculpas”.