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Los cuatro acusados por el crimen de Leandro Denegri, el joven asesinado hace dos años en Wilde, cuando le quisieron robar el auto, podrían ser condenados a la pena de cárcel a perpetuidad si se hace lugar a los pedidos de la fiscalía y la familia de la víctima que ayer, ante el tribunal, exigieron la máxima sanción para los acusados. Además, la familia Denegri pidió que se reabra la investigación contra un joven que en el momento del crimen tenía 16 años y que había sido sobreseído provisionalmente en la causa. La sentencia se conocerá el miércoles próximo a partir de las 9.30. La fiscal Viviana Suárez solicitó la pena de prisión perpetua para los imputados Marta “Cheru” Pacheco, Claudio “Tato” Ortiz, David “Trapito” Méndez y Maximiliano “Cepillo” Tulián. Los abogados de Denegri, Gustavo Tiemstra y Sergio Banchero, reclamaron la reclusión a perpetuidad. Es que la reclusión supone un trato más duro en las condiciones de alojamiento y en los posibles beneficios para cumplir la condena. Los defensores de los acusados plantearon distintas causales de nulidad durante la instrucción y solicitaron la absolución de sus defendidos. Y en caso de que fueran hallados culpables, pidieron que se los condene por “homicidio en ocasión de robo”, con penas de entre 8 y 25 años de cárcel.