Después de tres horas y media, ella dejó de conservar las huellas físicas que la ataban al sexo que no deseaba, que no sentía. Sus pechos prácticamente desaparecieron. Sus órganos genitales femeninos se convirtieron en masculinos con su misma piel. Ayer, el paciente salió de terapia intensiva y se recupera favorablemente.

Esta es la historia de una mujer de 50 años de Mar del Plata que se sometió a una operación de cambio de sexo, aunque los especialistas explican que no se trata de un cambio en profundidad, sino que consiste en operaciones de reasignación, en las cuales se extirpan los órganos sexuales anatómicos y se obtiene una aproximación anatómica al otro sexo.

La intervención se efectuó el lunes en el Hospital Gutiérrez de La Plata y ayer el paciente salió de terapia intensiva. “Se encuentra bien, se está movilizando y con buen estado de ánimo. Evoluciona sin dolor”, afirmó a Página/12 César Fidalgo, el urólogo que coordinó la intervención.

Lo que se le efectuó fue “una mastectomía, que es la extracción de mamas. Se adaptó el tórax a uno masculino. Se modificaron los genitales. Con tejidos del abdomen se efectuó un pseudopene y se implantaron dos prótesis testiculares de silicona. Con los labios mayores de la vagina se confeccionó la bolsa escrotal donde se le colocaron las prótesis”.

De aquí a un año “se le colocará una prótesis peneana para que tenga erecciones. Podría haber una intervención más para que se le coloque la uretra para orinar de pie”, especificó el especialista.

Esta “es la segunda operación de este tipo. La primera fue hace cuatro meses en una clínica privada. En cuanto al proceso inverso ya se han efectuado ocho”. Esta fue la primera vez que una mujer transforma su cuerpo mediante una intervención quirúrgica en un centro asistencial del sistema público de salud de la provincia de Buenos Aires.

También el médico explicó que la operación fue más corta de lo habitual porque “el paciente ya no tenía útero ni ovarios”.

La identidad del paciente se mantiene en reserva. La intervención tuvo lugar después de un año y medio de un extenso trámite ante la Justicia, que finalmente autorizó el cambio de sexo.

La causa estuvo a cargo del juez marplatense Juan Manuel Fernández Daguerre, quien en abril de 2005 autorizó la intervención y ordenó la entrega de un DNI masculino a la reclamante.