El Sindicato de Peones de Taxis (SPT) que lidera Jorge Viviani y las organizaciones empresarias de la actividad decidieron el estado de alerta, movilización y asamblea permanente en rechazo del plan urbano de tránsito lanzado por el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.

El sindicalista explicó que el gremio y las entidades patronales decidieron de forma “unánime” la medida y adelantó que “unos cuatro mil trabajadores deliberarán el miércoles próximo en asamblea general para determinar los pasos a seguir”.

Viviani sostuvo que, si bien “es necesario implementar medidas concretas para alcanzar los objetivos, se observan con gran preocupación sus efectos negativos para la actividad y los usuarios, porque implicaría la exclusión de los taxis desocupados de carriles o vías preferenciales”.

“A partir de lo confuso de las medidas, la falta de precisión sobre las arterias y avenidas afectadas, su operatoria y lo contradictorio entre lo anunciado públicamente y lo expuesto en reuniones anteriores, el gremio reafirma su total rechazo a cualquier decisión que implique discriminación”, sostuvo Viviani. El gremialista indicó que los trabajadores no permitirán que se los discrimine en “los carriles exclusivos o preferenciales, negándoles el carácter de personal de un servicio público”.