SOCIEDAD › PERFIL DE QUIENES ROBAN BEBES
“Son casos aislados”
Si bien en un breve período salieron a la luz dos casos de bebés robados, dos especialistas consultados por Página/12 negaron que se tratara de una práctica común en la Argentina. “A lo largo de los ocho años en los que venimos trabajando con niños perdidos, sólo tuvimos cinco casos de bebés que fueron robados a sus padres a tan temprana edad”, explicó Juan Carr, de la Red Solidaria.
El primero de los casos del que tienen registro en la organización solidaria es el de Edith Canchi, una joven boliviana a la que le sustrajeron de sus brazos a su bebé de tan sólo dos meses en la maternidad Sardá y al que aún siguen buscando. El segundo es el de Jesús, un bebé de siete meses que fue robado el año pasado mientras dormía junto con sus padres en la calle y que, a diferencia del bebé de Edith, pudo ser encontrado sano y salvo luego de una intensa campaña mediática.
A comienzos de este año se produjo el tercer caso y el segundo en la calle. Esta vez ocurrió en la puerta de la Parroquia Monserrat, a metros del Ministerio de Salud, donde desapareció un bebé de 20 meses del que todavía nada se sabe.
Por último, el domingo se conoció el caso de la chiquita que fue arrebatada de las manos de su madre en la estación de micros en Córdoba, quien aún no apareció, y ayer el de la bebé del partido de Rivadavia que fue recuperada por la familia. “No vemos que haya una organización dedicada a esto. Incluso los jueces de menores conocen poquísimos casos. Lo que sí puede haber son adopciones ilegales en donde media un contrato monetario, pero ése es otro tema”, sostuvo Susana Murray, de Missing Children.
En cuanto al perfil de los sustractores, la experiencia dice que mayormente son mujeres solas o parejas que por alguna razón no pueden tener hijos y buscan llegar a su sueño por medio del robo. “Obviamente tienen problemas mentales. En San Isidro, por ejemplo, durante una época se registraron varios casos de intento de robos de los cochecitos con los bebés adentro y en todos ellos las madres describieron a la ladrona como una mujer desequilibrada”, agregó Carr.