SOCIEDAD
Los custodios ladrones
El martes, la tranquilidad del barrio cerrado Barrancas de San Isidro se evaporó en la madrugada. Entre cinco y seis delincuentes armados llegaron a una de sus dos entradas y redujeron al vigilador. Le quitaron la ropa y uno de los intrusos se la calzó para caminar por el barrio sin despertar sospechas. Así llegaron a la casa de un médico, a la que entraron tras forzar una cerradura. Sorprendieron a sus ocupantes durmiendo y los amenazaron mientras buscaban objetos para robar. Pero el vigilador desnudado logró liberarse y alertó a la policía, que rodeó la vivienda y los detuvo. Fuentes de la fiscalía de San Isidro a cargo de Martín Mateo revelaron que la banda estaba integrada por miembros de una agencia de seguridad encargada de custodiar otro barrio privado.