Los principales ejes de la nueva policía que propone Marcelo Saín para el candidato Daniel Filmus:

- Servicio de Seguridad Preventiva: Un sistema de conducción, planificación y evaluación de las tareas preventivas, focalizadas, vía mapeo delictivo, pero a través de las comunas. Se armaría una estructura de mando medio de manera que de cada comuna dependan determinados destacamentos policiales o comisarías pequeñas. Se delimitarían las circunscripciones policiales según ciertas variables demográficas y sociales. Se armaría una fuerza bajo el concepto de que la seguridad preventiva policial siempre es local y debe trabajar sobre instancias muy acotadas en lo espacial. “Si construimos unidades operacionales de mando medio que sean regionales y coincidan con las comunas tenés una visión más integral de la problemática”, asegura Marcelo Saín.

– Servicio de seguridad compleja: Perseguirá los “emprendimientos criminales que supongan grupos delictivos organizados”. En este caso la división sería por problemas, no territorial. En primer lugar una división narcotráfico y otra de delitos complejos. “El policiamiento debe ser no territorialista sino por problema delictivo. Acá acercás el problema delictivo al tipo de intervención específica de inteligencia, de operaciones y de logística”, observa el ideólogo de la nueva fuerza.

– Servicio de Policía Judicial: Cuando se estructure la Justicia criminal tendrán que prestar servicios periciales, y de policía científica o de investigación vía detectives para casos penales.

– Régimen profesional nuevo: El actual, considera Saín, es extremadamente rígido y militarizado. El régimen tendría primero una división entre personal civil sin estado policial que haga tareas administrativas y personal policial con tareas policiales. Existirá oficialidad única. Y los administrativos no serán policías sino civiles. Según Saín, se hará una “diferenciación entre las carreras”. El que es policía de patrullero hará su carrera en la calle y el que investiga lo hará en Seguridad Compleja.

– Sistema de profesionalización y ascenso: Hoy el ascenso tiene que ver con una estructura de corte militar que son las juntas de calificación, donde la antigüedad y la ausencia de sanciones disciplinarias son los ejes centrales para un ascenso y la ocupación de cargos. Para los ascensos se evaluaría el desempeño profesional anualmente, y la capacitación.

– Designación de jefes: Un mecanismo moderno que contemplaría el concurso interno y evaluará no sólo la capacitación y el desempeño, sino la participación de la comunidad.

– Sistema de capacitación: “En esto somos tradicionales. No queremos capacitación holística. Al policía no hay que enseñarle el Pacto de San José de Costa Rica para que sea un policía progresista y no viole los derechos humanos. En su labor debe estar subsumida la enseñanza de prácticas donde haya respeto. No hay que enseñarle derecho y sociología desde la doctrina. Debe estar anclado en su formación por competencia, el modelo holandés”, sostiene Saín.

– Régimen y escala salarial nuevo: “Una policía profesional que tiene que hacer servicio adicional no camina. Tenemos que tener policías que hagan su servicio regular y de ahí se tiene que ir a tomar cerveza con sus amigos, a la cancha, al club o a juntarse con su familia. No puede ser profesional haciendo adicionales para llegar a tres mil pesos por mes”.

– Sistema de control: “No creemos que el área de control interno deba depender del mismo jefe al que tiene que controlar, entre otros. Debe ser un auditor que sea una suerte de fiscal de faltas disciplinarias graves, amén de los delitos. Que investigue el mapa de la corrupción y de riesgo dentro de la propia policía. Un tribunal que juzgue las faltas graves, y la figura del defensor del policía”.