La presidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó hoy que "no me hubiera gustado tener que hacer este tipo de reunión" porque no es para analizar planes para "seguir con este circulo virtuoso sino para anunciar un plan de contigencia".

La Presidenta señaló que "pese a tener el crecimiento más importante de los últimos 200 años estábamos en esta historia cuando de repente apareció el mundo y nos complicó la vida a los argentinos".

La Presidenta aseguró que la crisis financiera internacional "obliga a funcionarios, empresarios y trabajadores a articular esfuerzos y políticas proactivas, contracíclicas", con el fin de mitigar el impacto de la crisis.

"Esta vez la crisis no la producimos los argentinos. Tal vez los argentinos vamos a tener que sufrir una parte de esa tragedia, originada en los centros desde los cuales tanto se nos criticó en estos cinco años y medio", señaló la mandataria.

Fernández de Kirchner anunció que el Gobierno destinará 13.200 millones de pesos para llevar adelante un plan de incentivo a la producción, la inversión, el trabajo, el empleo y el consumo, para paliar los efectos de la crisis internacional.

La mandataria explicó que con el plan se apunta a "la oferta y la demanda, los dos ejes que constituyen las palancas del crecimiento de nuestro modelo, basado en el mercado interno y el sesgo exportador de nuestras economías".

La Presidenta afirmó además que el Gobierno tiene como objetivo "tratar de recrear un mercado de capitales que permita el acceso al crédito a los sectores de producción de bienes y servicios".

Para el sector agropecuario, las medidas anunciadas consisten en créditos por 1700 millones de pesos para prefinanciar exportaciones y la disminución de 5 por ciento en las retenciones al trigo y el maíz, que quedarán en 23 y 20 por ciento respectivamente.

La mandataria precisó que dentro del plan, que contempla una inversión total de 13.200 millones de pesos, "3000 millones de pesos se destinarán a las pymes".