En diálogo con La Red, Aníbal Fernández se refirió en particular al afiche anónimo en el que se acusa a un grupo de periodistas de Clarín de “servir a la dueña de un multimedia que está acusada de apropiación de hijos de desaparecidos”. El jefe de gabinete repudió este tipo de ‘escrache’, volvió a desvincular al kirchnerismo de su autoría y dejó entrever que el propio Grupo Clarín podría estar detrás de su elaboración.

“No veo una andanada contra los periodistas. Me gustaría saber qué quisieron hacer con el afiche, que alguien levantara la mano y dijera ‘fui yo’. (...) Nosotros no diríamos multimedia sino monopolio, cosas mucho más duras. Sin embargo, nadie aparece, es raro porque siempre alguien se hace cargo de estas cosas. Además no es muy difícil saber de qué imprenta salió y si no se puede saber de qué imprenta salió, ¿no será de alguien que tiene una imprenta propia y por eso no sale?”, se preguntó.

El funcionario ratificó que los escraches le parecen “un método espantoso”. “Yo estoy en contra de eso. Yo nunca creí en los escraches, de ninguna manera. Me parece un método espantoso, no da ningún tipo de ventaja, no aporta ningún tipo de soluciones y me parece que es condenable”, dijo.

Por otra parte, y en relación a la denuncia efectuada por el empresario Daniel Vila, quien aseguró haber sido agredido ayer a la salida de la cancha de Quilmes por grupos que responden al secretario general de AFA, José Luis Meizner, Fernández afirmó “desconocer por completo” lo sucedido, porque “la última vez que fui a ver a Quilmes fue el 2 de abril de 2005”.

Respecto a los dichos del ex jefe de Gabinete Alberto Fernández, quien sostuvo que “hay que desplazar a la generación del ‘70”, Aníbal respondió que “le cuesta creer” que ésta sea una referencia a Néstor Kirchner, llamada a cuestionar su eventual candidatura.

"A mí me cuesta creer que sea así, porque se sentaba a su mesa a comer con ellos de la misma manera que iba a Río Gallegos o se quedaba a dormir en la cama de sus hijos. A mí me cuesta creer que uno tenga durante tantos años una relación de esas características, y de golpe y porrazo termine siendo un gran crítico: o se equivocó antes o se equivoca ahora”, dijo.

El jefe de Gabinete rechazó en forma enfática que desde el oficialismo se impulse una marcha en contra del vicepresidente, Julio Cobos, e ironizó que "de lo único que tiene que cuidarse" el ex gobernador mendocino "es de la máquina de pisar traidores".

Fernández se preguntó "¿por qué hay que hacerle algún daño a alguien?", y afirmó que "eso terminó hace muchos años, gracias a Dios, y no vuelve más". Recordó que "en un acto en Vicente López, frente a sus correligionarios Cobos afirmó, en su momento, que 'el Frente para la Victoria gana solo, no nos necesitan a nosotros. Nos están invitando a formar parte de un proyecto político'".

"Después, todas las veces que pudo oponerse, se opuso. No solamente con la 125: lo hizo con las AFJP, con el impuesto al cheque, las reformas electorales, la ley de medios", indicó. "Lo hizo con todas las cosas que pudo, tratándose de erigirse, porque no lo es, en el jefe de la oposición, para ver si podía colar como candidato a presidente, que no lo va a ser, porque nadie es tan tonto en este país para no darse cuenta de los valores que tiene cada uno".