El fiscal Alejandro Varela había sostenido ayer que "Grassi podría fugarse porque ya lo hizo en dos oportunidades. Cuando lo fueron a buscar a la Fundación Felices los Niños antes de la emisión del programa de Telenoche Investiga, y cuando estaba dando una nota en Canal 9, y pudo eludir a la Justicia porque alguien llamó y avisó. (...) No detenerlo sería violar el principio de igualdad ante la ley contemplada en el artículo 16 de la Constitución Nacional".

Piris, por su parte, advirtió que "antes, Grassi asistía con puntualidad a todas las audiencias y cumplía con lo que la Justicia le requería porque tenía expectativa de salir absuelto". "Esa posibilidad se fue alejando tras el fallo de primera instancia, del TOC 1 de Morón, y su confirmación por parte de la Cámara de Casación. (...) Ambos pronunciamientos salieron por unanimidad de los jueces". Para el letrado, "hoy el peligro de fuga del sacerdote es una realidad" y el tribunal a cargo de la libertad del condenado es el TOC 1, por eso la presentación se hace ante la primera instancia.

En el fallo del martes, Casación sostuvo que los jueces de Morón, que condenaron al cura en junio del 2009, son los que deberían resolver la detención, de acuerdo al artículo 371 del Código Penal, invocado tanto por la fiscalía como por la defensa. El primer pedido de detención fue presentado por la fiscalía ayer, a 48 horas del fallo de la Cámara de Casación de la Provincia de Buenos Aires, y el segundo correspondió a Piris, en representación de Gabriel, también en el mismo tenor.

Ricardo Malvicini, defensor del cura, aseguró que "antes de que se expidiera Casación ya habían hecho un pedido de reserva, para apelar ante la Suprema Corte bonaerense. "Agotaremos todas las instancias para lograr la absolución del padre Grassi", sostuvo Malvicini, quien anticipó que "después de estudiar el fallo decidirán qué tipo de recurso presentarán".