Entre amenazas y operativos de seguridad, Uribe mantuvo su agenda y llegó temprano al teatro donde se llevó a cabo el "WOM Leadership Symposium", donde finalmente habló a las 16.30. Mientras dos agentes de la policía lo cuidaban en el escenario y el Grupo Especial de Operaciones Federales (G.E.O.F.) de la Policía Federal esperaba su salida, los ciudadanos colombianos que se manifestaban sobre Corrientes repartían un comunicado entre los presentes en el que señalaban que el exmandatario "viene a la Argentina a presentar una realidad colombiana pacífica", pero "en realidad este hombre cometió crímenes atroces contra el pueblo colombiano". "Uribe, fascista, vos sos el terrorista", corearon.

En la mañana y luego de las versiones encontradas entre el magistrado y la Policía Federal sobre el poder destructor del artefacto, Oyarbide encomendó a la División Explosivos de la Policía Federal el informe sobre la bomba. Mientras tanto, se analizan las cintas de las cámaras de seguridad y los registros de ingreso del teatro para intentar dar con la o las personas que pusieron la bomba que iba a ser detonada hoy a las 16.20 durante la conferencia de Uribe.

El juez mostró su enojo luego de que ayer la policía minimizara el poder del explosivo al ironizar: "Aparece una versión policial dando cuenta de que era una bombita de olor". Por eso, podría iniciarse una investigación para determinar las discrepancias posteriores dentro de la fuerza.

Fuentes judiciales ratificaron que fueron los propios expertos de la policía los que le informaron a Oyarbide, durante una inspección ocular que hizo al teatro, que la bomba hallada tenía un fuerte poder de daño. Los expertos le habrían explicado que la bomba podía destruir todo el ventanal del Gran Rex y que por su magnitud podía causar graves daños, ya que la rotura del vidrio generaba un efecto desconcertante entre el público asistente y el resultado de eso era una estampida de gente tratando de salir del teatro por escaleras muy empinadas.

Hasta el momento, una de las hipótesis que maneja la Justicia es que la explosión buscaba generar un efecto de distracción para aprovechar la confusión y atentar contra Uribe de otro modo.

Desde Colombia, el presidente Juan Manuel Santos prometió "llegar hasta el fondo" con la investigación para determinar quiénes fueron los responsables y señaló que ordenó al saliente director de la Policía de su país, general Oscar Naranjo, para que investigue el hecho.