Rodríguez Larreta, en diálogo con Radio Continental, explicó que una de las variables que se analizan para definir el precio del boleto es el alquiler de locales, derechos por uso de la infraestructura para las redes de fibra óptica y la publicidad, ya que el gobierno porteño con la ley de aceptación del traspaso del servicio le quitó la explotación "al concesionario y tomamos para el Estado el manejo de los negocios periféricos". "Creemos que eso se puede explotar más y mejorar la recaudación, lo que contribuiría a atenuar el aumento previsto", apuntó.

Además, el jefe de gabinete porteño se refirió también a los dos meses que la línea A permanecerá inactiva para adecuarla a los nuevos vagones y señaló que "estamos evaluando reforzar la frecuencia de colectivos" que cubren el trayecto entre Plaza de Mayo y Flores, para atender la mayor demanda que se producirá por la inactividad del subte.

El funcionario ratificó la necesidad de suspender el servicio durante ese lapso porque "es el tiempo que se necesita para realizar pruebas y ajustes" de adaptación para los nuevos vagones. El tiempo en el que permanecerá cerrado el servicio fue considerado "una locura" por los Metrodelegados, mientras que el ministro de Transporte, Florencio Randazzo, sostuvo que el gobierno nacional renovó las vías de la Línea A "sin cerrar el servicio un solo día".

Rodríguez Larreta puntualizó que los 45 coches adquiridos en China por Gobierno nacional "tienen aire acondicionado y tecnología de última generación" y se manifestó satisfecho con los resultados de una prueba sobre su funcionamiento realizada ayer.