Ante un auditorio compuesto por empresarios y sindicalistas, CFK auguró desde Río Gallegos, donde presidió el acto de adjudicación de las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, que "tendremos una reunión productiva, porque luego de 10 años de un gobierno que ha tenido éxitos importantes en materia de crecimiento económico, desarrollo industrial y desendeudamiento es necesario discutir". Comparó algunos datos macroeconómicos de la Argentina con Canadá y Australia, con la intención de "derribar mitos, mentiras o falsedades que se quieren instalar en la sociedad".

"La actividad económica -advirtió- creció un 5,1 por ciento en lo que va del año, en un mundo que se derrumba y donde se cae el trabajo", y a continuación agregó que "los gurúes que dicen que la situación fiscal es endeble son los mismos que nos decían que en el 2001 estaba todo bien". "Nos dicen que las cuentas externas no cierran, lo vemos en los titulares de algunos diarios. Luego de recordar que la "Argentina cuenta con 37 mil 76 millones de dólares en reservas", se preguntó "¿porqué nadie pone en discusión la solvencia fiscal de países como Australia o Canadá?".

"Hay que terminar con estos mitos. Mi sueño es que los argentinos estén lo suficientemente informados para tomar sus determinaciones con la mayor libertad y nadie pueda meterles el perro, porque esto pasó en la Argentina y no quiero que vuelva a pasar", sostuvo.

En cuanto al diálogo con los distintos sectores de la economía nacional, la Presidenta destacó la importancia de que "podamos intercambiar opiniones sobre estos 10 años, las cosas que hemos hecho, las que faltan hacer, las que hicimos mal y bien". "Pero esta autocrítica y reflexión también se la pedimos a cada uno de los sectores. Escucho críticas al sector público, al gobierno, que seguramente tiene cosas que mejorar y corregir, pero me gustaría también escucharlo de algunos sectores de la actividad económica", añadió.

Acerca de la "electrificación del Río Santa Cruz", Cristina remarcó que se trata del "mayor emprendimiento en materia hidroeléctrica, después de Yaciretá", que aportará 1740 megavatios al sistema, fruto del éxito del tercer proceso licitatorio que se encara para construir la obra, luego de que fracasaran los dos primeros intentos por falta de financiamiento. "La obra pública -agregó- no se gana haciendo lobby o denunciando a otras empresas: este proceso se ha hecho con absoluta transparencia", destacó la mandataria.

En ese marco, le pidió a los empresarios que habitualmente participan de los concursos de adjudicación que tengan una "buena conducta empresaria" y aclaró que no le "importa quién gane la obra, sino que la obra se haga". Anunció, además, que en septiembre Santa Cruz estará "definitivamente integrada" al resto del país en materia energética y que se eliminará el "molesto 6 por mil" de las facturas de los usuarios de electricidad de todo el país.

Aclaró que "no fue un capricho" ponerle el nombre de Kirchner y Cepernic -elex gobernador santacruceño en la década del 70- a la represa, sino que fue "un reconocimiento del pueblo de Santa Cruz expresado a través de sus representantes en la Legislatura". Más adelante añadió que "si para ser un 'empresario K' hay que haber ganado mucho dinero, desde acá diviso muchos", pero aclaró que “no se trata” de que las empresas tengan afinidad o no con el gobierno sino de los “empresarios que hagan buenas inversiones”. La mandataria precisó, además, que las reservas del Banco Central ascienden a 37.076 millones dólares, lo que significa un 7,8 por ciento del PBI, y explicó que alcanzarían los 52 mil millones si no hubiera habido que utilizar reservas para contrarrestar "las corridas cambiarias" e importar energía por la "declinación de la producción de YPF".

"Sueño con una Argentina lo suficientemente informada para que nadie vuelva a meterles el perro", destacó la Presidenta y agregó que "yo sé que los temas económicos son álgidos pero si todos supieran un poco más, tomarían las decisiones con mayor libertad".

Hoy, a través de su publicación en el Boletín Oficial, el Ejecutivo adjudicó la construcción de las represas -a ejecutar por cuenta del Estado nacional en la provincia Santa Cruz- al consorcio integrado por Electroingeniería SA, China Gezhouba Group Company Limited e Hidrocuyo SA, por un monto de 22.925.870.000 pesos. La adjudicación fue ratificada por la resolución 760/13, que además desestima la oferta del consorcio integrado por Constructora Norberto Odebrecht S.A.(sucursal argentina), Industrias Metalúrgicas Pescarmona y Alstom Brasil.

La primera actividad de la Presidenta tuvo lugar en la sede del Obispado de Río Gallegos, donde estuvieron, entre otros, Héctor Méndez (UIA); Eduardo Eurnekian (Cámara de Comercio); Gustavo Weiss (Cámara de la Construcción); Jorge Brito (Asociación de Bancos Privados); Ider Peretti (CGE) y Osvaldo Cornide (CAME). Participan de la convocatoria, además, la CGT, encabezada por su secretario general, Antonio Caló, y la CTA de Hugo Yasky.