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El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional temen un retroceso "castastrófico" de la economía y el comercio como consecuencia de la epidemia, tanto en Liberia como en Sierra Leona y Guinea, los países del África Occidental que ya tienen una economía débil, y en los cuales grandes porciones de su territorios han sido declarados en cuarentena. El Producto Interior Bruto en Liberia podría retroceder dos dígitos el próximo año, en Sierra Leona casi un 9 por ciento y en Guinea un 2,3 por ciento. La mayoría de las aerolíneas internacionales han suspendido los vuelos a Monrovia y el comercio exterior está prácticamente paralizado, mientras que la agricultura está al borde del colapso.

La situación no es muy diferente en Sierra Leona, donde más de dos millones de personas viven en las zonas afectadas por el ébola. Los agricultores no pueden llevar sus productos a los mercados o a los intermediarios. "Las cosas se pudren rápidamente y si no las podemos vender, pronto no tendremos nada que comer", advirtió Kaditu Kamara, una mujer que vive de lo que cosecha en el distrito de Port Loko, uno de los afectados por las medidas de aislamiento. "Nuestro negocio se ha hundido. Lo poca comida que todavía nos queda se habrá acabado pronto", se lamentó Alhaji Mansaray, un pequeño comerciante.

Paradójicamente, en Nigeria, el país más poblado de África, con 170 millones de habitantes, donde han muerto sólo ocho de las más de 3000 muertes por ébola en África Occidental, el virus ha hecho florecer el comercio online. En Jumia, la mayor empresa de venta en Internet del país, se han triplicado los pedidos de productos de uso cotidiano desde que estalló la epidemia. También se ha registrado un fuerte incremento en las empresas rivales Konga y Kaymu.

Las imágenes de personas muriendo en las capitales de Liberia y Sierra Leona, Monrovia y Freetown, han provocado que la población evite las grandes concentraciones de personas en los supermercados o en los centros comerciales, y las tiendas online están sacando partido de ello. Además han registrado una fuerte demanda de productos sanitarios y de desinfección.

Mientras tanto, el "gran ganador con el ébola" es la empresa canadiense de biotecnología Tekmira Pharmaceuticals, que está trabajando en el desarrollo de una vacuna contra la enfermedad, y cuyas acciones han subido más de un 20 por ciento en las últimas semanas, al tiempo que la Organización Mundial de la Salud espera contar con decenas de miles de dosis antes de 2015.

La empresa de venta de acciones Lynx, por su parte, confía en que pronto llegue al mercado un remedio "útil, confiable y sobre todo económico para que la población lo pueda adquirir". Según la agencia d enoticias dpa, se especula incluso con recursos naturales y alimentos, los denominados "futures", que en el caso de una mayor expansión de la epidemia se encarecerán rápidamente, tal como ya ha sucedido con el cacao.

El diario "The Wall Street Journal" explica que el 60 por ciento de la producción mundial de cacao procede de Costa de Marfil y Ghana. Y ambos países tienen fronteras no controladas con los países afectados por el ébola, entre ellos Liberia y Guinea. Si la enfermedad llega a las regiones del cacao, la producción podría caer. "La última vez que las exportaciones de Costa de Marfil se paralizaron, durante la guerra civil a fines de 2010 y principios de 2011, los precios del cacao a futuro aumentaron hasta un 32 por ciento".

En tanto, la portavoz del hospital Howard University, de Washington, Kerry-Ann Hamilton, confirmó que un paciente que había viajado a Nigeria, ingresó al establecimiento con los síntomas del ébola, y se encuentra estable e internado en una sala de aislamiento. "Nuestro equipo vigila todo esto en colaboración con el Departamento de Salud", añadió.

El martes pasado otro paciente fue diagnosticado con ébola en Dallas, en el estado norteamericano de Texas, el primer caso en Estados Unidos y el primero fuera de África desde el inicio de la actual epidemia.