Abrazos, risas y llantos se vieron entre los alumnos del Colegio Nacional de Buenos Aires luego de la reunión que mantuvieron con Horacio Sanguinetti, rector de la principal escuela secundaria pública de esta ciudad.

El Centro de Estudiantes decidió la toma pacífica del establecimiento en rechazo a una sanción disciplinaria a un compañero, exigiendo que el Consejo de convivencia fuera ámbito de discusión sobre sanciones a los alumnos y la derogación de una circular que prohibía las asambleas y medidas de protesta dentro del colegio.

Facundo Fernández Barrio, del Consejo de Convivencia del turno tarde, uno de los estudiantes presentes, contó a Página/12 Web que lograron la solución a la mayor parte de sus reclamos en la reunión que mantuvieron con el rector Horacio Sanguinetti.

El rector se comprometió a derogar la resolución 463 del año 2002 que prohibía todo tipo de protesta o asambleas dentro del colegio, también se aprobó que el Consejo de Convivencia tenga decisión sobre las sanciones disciplinarias a los alumnos.

Se acordó además la formación de un grupo de trabajo que estudie la reforma del Departamento de Orientación y presente un informe dentro de las próximas tres semanas.

Por último, se decidió la revisión de la sanción a un alumno que quedó al borde de la expulsión y que detonó el conflicto. Según detallaron los estudiantes, se supo que el cuestionado vice-rector del turno tarde Arnoldo Siperman habría renunciado, con lo que quedaría despejado el terreno para el levantamiento de la sanción al joven.

Informe: José Luis Meirás