"Cuando lo descubro ya no me podía sentar en el grupo, quedaba un poco mal, quedaba feo. Además, no me pagaron lo que me habían prometido....", se quejó el ex reducidor de autos, que pasó diez años detenido a raíz de estar acusado del ataque a la mutual judía y terminó absuelto.

Telleldín admitió que al enterarse quiso trompear "a los dos" letrados y se jactó de que tras su salida del equipo de defensores de Grassi "empezaron a tener problemas y no respuestas" porque en ese grupo "no hay ideas. El derecho penal no es conocimiento puro. Podés poner un mono a escribir en la computadora y es brillante".

"En 2005 yo incorporé a la defensa a Laura Fecchino y Andrea Novelo que trabajábamos juntos en un estudio en Capital" detalló el abogado, en una entrevista al Diario de Morón, y aclaró que hasta ese momento la defensa de Grassi "era el estudio de Jorge Sandro (abogado del Grupo Yabrán), el estudio de Hugo Wortman-Jofré y el estudio de Julio Virgolini". Estas declaraciones se conocen un día después que se supiera que, entre el numeroso equipo de defensores, cuatro abogados renunciaron a seguir en esa tarea: Adrián Maloney, Luis Osler, Andrea Novello y Laura Fecchino, de la cual Telleldin dice que mantenía con él una relación sentimental.

Hoy el abogado Eduardo Valdes, representante de "Gabriel", uno de los denunciantes, reiteró a radio Mitre que "la Fundación Felices los Niños, con dinero que proviene del Estado y de donaciones privadas, le pagó a la defensa jurídica de Grassi, aunque no es esa su misión".

"Nosotros descubrimos que tres cheques de la Fundación a Frigoríficos Cañuelas, que abastece de carne al comedor de los chicos, fueron endosados a la cuenta sueldo de Viviana Galli, una maestra porteña que es la madre de la abogada Fecchino", detalló.

Grassi está acusado de abuso deshonesto, corrupción de menores y amenazas, a raíz de las denuncias que hizo públicas el 23 de octubre de 2002 el programa "Telenoche Investiga", donde se detalló el relato contra el cura de dos menores identificados como "Gabriel" y "Ezequiel", que pertenecían a la entidad.

Tras un largo proceso en el que Grassi acusó a la justicia de Morón de perseguirlo e intentar someterlo a "un linchamiento público", finalmente iba a ser sometido a juicio a partir del 3 de julio pasado por el TOC 4 de Morón, pero el debate se frenó tres semanas antes por la denuncia de la Fiscalía sobre la supuesta falta de parcialidad de los jueces.

Fuente: DYN