El estallido ocurrió a las 5:00 locales (las 7:00 en Argentina) en la Plaza del Valle al Sur, un centro comercial de Oaxaca, capital del estado mexicano homónimo y escenario desde el año pasado de violentas protestas opositoras.

Los cristales de algunas ventanas y la puerta principal del almacén resultaron con serios daños, informó la agencia italiana ANSA.

Mientras ninguna organización se atribuyó el atentado, el procurador general de Justicia de Oaxaca, Evencio Martínez, descartó que haya sido obra del Ejército Popular Revolucionario (EPR).

El mes pasado el EPR detonó bombas en ductos del coloso estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) en los estados occidentales Querétaro y Guanajuato.

El EPR exige la presentación de dos de sus activistas, dirigentes de la organización, que están desaparecidos.

Paralelamente, una alforja con material explosivo fue hallada dentro de un banco en el barrio Reforma, al norte de Oaxaca, por lo que la policía buscaba otros artefactos similares.

Los hechos ocurrieron cuatro días antes de efectuarse comicios para elegir diputados locales en Oaxaca, y un día después de la visita de la secretaria general de la organización humanitaria Amnistía Internacional (AI), Irene Khan, para constatar la situación de los derechos humanos en la zona.