"En la noche de ayer, las autoridades uruguayas han otorgado el permiso para que la planta de celulosa de Botnia en Fray Bentos, Uruguay, comience sus operaciones", dice un comunicado de Botnia.

De esta manera, Botnia confirmó que la planta inició el proceso de puesta en marcha de su actividad industrial, paso previo a la producción de pasta de celulosa propiamente dicha, que tomará unos días.

El presidente de Botnia, Erki Varis, celebró "este momento muy importante" para la empresa y aseguró que se trata de "una de las plantas más modernas del mundo".

Por su parte, Ronald Beare, gerente general de Botnia, agradeció a "los 7.000 trabajadores que participaron de la construcción de la planta, a los más de 1.000 profesionales y técnicos que desarrollaron el proyecto, y a la "comunidad de Fray Bentos" por su "confianza y apoyo."

Si bien desde la empresa afirman que la planta de Fray Bentos será "un ejemplo de desempeño ambiental", los habitantes de Gualeguaychú, localidad entrerriana ubicada frente a la planta al otro lado del Río Uruguay, rechazan su presencia porque temen por el daño que ocasionará en el medio ambiente y en la salud de los habitantes de la zona.

En este marco, el titular de la pastera finlandesa insistió en que la planta de Fray Bentos, la sexta de Botnia y la primera fuera de Finlandia, "ha sido diseñada de acuerdo a las últimas y más modernas tecnologías y va a operar según los estándares exigidos por la legislación uruguaya y la Unión Europea".

Botnia invirtió 1,200 millones de dólares en la planta de Fray Bentos, que tendrá una capacidad total de producción anual de un millón de toneladas de celulosa que serán exportadas a los mercados europeos y asiáticos, principalmente, dice el comunicado.

Fuente: Télam