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"La verdad es un verdadero desastre, hay unas 10 mil personas afectadas, 1100 personas evacuadas y una gran parte de la ciudad, le diría la mitad, tiene unos 15, 20 centímetros de lodo", explicó Randazzo.

El ministro consideró en declaraciones radiales que "no fue una tragedia peor porque sucedió a las 10 de la mañana" y dijo que "si esto hubiera ocurrido en horas de la madrugada, estaríamos lamentando cientos de víctimas".

El alud de barro se originó por las intensas lluvias del sur de Bolivia y en esa región argentina, que tornaron intransitables los caminos vecinales que vinculan a Tartagal con otras localidades.

"Nos ha mandado la Presidenta", recordó Randazzo y precisó que en Tartagal está "con la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, con la gente de Asuntos Hídricos de la Nación, con el director nacional de Vialidad, con el viceministro de Salud".

Consultado acerca de las causas del fenómeno, Randazzo dijo que en Tartagal "los comentarios son que esto se origina a partir de un desmonte importante".

No obstante, el funcionario consideró que esa afirmación "hay que comprobar, más allá que uno cuando ve lo que ha ocurrido se encuentra con que hay cientos de árboles". Randazzo explicó que también se observan "árboles arrancados desde las raíces, que han formado en el puente ferroviario, que está justo en el río Tartagal, un dique de contención hasta que la presión del agua llegó y arrancó el puente y ahí desbordó el agua en toda la ciudad".

El funcionario dijo que en el lugar trabajan "para poder ayudar a paliar la situación de aquellos que están evacuados y que han perdido todo" y agregó que también ven "cómo resolvemos los problemas estructurales que son la pérdida de viviendas".