La victoria de Rafael Nadal sobre Roger Federer en el césped de Wimbledon hizo tambalear la cátedra, que daba por sentado que el número uno del mundo podía extender la leyenda con su sexto título en Londres. Pero, sobre todo, marca que la sucesión en el primer lugar del ranking parece inminente. Tanto que el español depende de sus producciones para lograr el sobrepaso. Si Nadal obtiene los dos próximos Masters Series, Toronto y Cincinnati, se convertirá en el nuevo líder. E incluso, el suizo puede perder su lugar de privilegio luego de US Open, aun ganando los tres certámenes. Por primera vez desde que se inició la lucha entre ambos, todo está en manos de Rafa.

Hace menos de dos meses, Nadal se vio muy apremiado para mantener el segundo lugar del ranking frente al serbio Novak Djokovic. Primero salvó la situación al ganarle en la semifinal del Masters Series de Hamburgo. Y tres semanas más tarde volvió a zafar con el triunfo en la misma instancia en Roland Garros. Sostenida la embestida del serbio, ahora va por la cabeza de Roger.

Desde que Federer logró acceder a la cima del ranking de la ATP el 2 de febrero de 2004, nunca antes se vio tan amenazado como ahora. Es que el suizo suma 6600 puntos, contra los 6055 de Nadal. Y aunque esta semana el español pierda 225 unidades por no defender el título obtenido el año pasado en Stuttgart y la diferencia se estire a 770 puntos, las perspectivas para que pueda destronarlo son inmejorables.

Terminada la temporada de césped, en dos semanas arranca la etapa del cemento norteamericano, con los Masters Series de Toronto, Cincinnati y el US Open como los certámenes clave para sumar. Allí está la gran diferencia en favor del mallorquí. Federer perdió la final de Canadá ante Djokovic y se llevó Cincinnati y el US Open, por lo que tendrá que defender 1850 puntos de los 2000 posibles. Por el contrario, Nadal cayó ante Djokovic en la semi de Toronto, se retiró ante Juan Mónaco en la segunda ronda de Cincinnati y cayó en octavos de final de US Open ante David Ferrer. Apenas defiende 380 puntos, por lo que tiene mucho por sumar, sin la necesidad de ganar ninguno de los torneos.

Con ese panorama, el español puede convertirse el número uno en Cincinnati. Con adjudicarse ese torneo y el de Toronto, el flamante campeón de Wimbledon conseguirá sumar 770 puntos a los 5830 que tendrá el próximo lunes, justo la diferencia que Federer le lleva actualmente. Pero en ese caso, el suizo perdería, como mínimo, 150 unidades por no defender el título del año pasado en Cincinnati. Y entonces, dentro de cuatro semanas, el 4 de agosto, el reinado de Federer que comenzó hace 230 y es el record absoluto de permanencia, podría llegar a su fin.

Tan complicada es la situación de Federer que ni ganando los dos Masters Series y luego el US Open podría retener el número uno. Si el español llega a las finales de los tres torneos, aun perdiendo las tres definiciones ante el suizo, se tornaría inalcanzable en el primer lugar con 7000 puntos, por encima de los 6750 que lograría Federer. Y si el suizo tropieza en alguno de los certámenes, Nadal tendrá un panorama más sencillo.

En el medio de los dos Masters Series y el último Grand Slam de la temporada, este año aparecen los Juegos Olímpicos, que también pueden resultar claves en la definición. Además de la medalla dorada, el certamen de Beijing otorga 400 puntos, que a esta altura aparecen como vitales en la pelea por el número uno. La lucha está planteada. Pero parece que esta vez Nadal está listo para dar el zarpazo.

Los puntos que defienden