Los jugadores de Boca no quieren hacerse cargo de la situación que vive Mauricio Caranta. Por más que lamentan lo que le está tocando vivir a su compañero, ninguno lo defendió de manera pública ni cuestionó la decisión del entrenador Carlos Ischia. “Es una situación bastante complicada y uno no quisiera estar en la piel de él. Dios quiera que se pueda resolver bien tanto para él como para la institución”, comentó Julio César Cáceres, uno de los jugadores que mejor relación mantienen con el arquero marginado. “Nosotros esperamos que todo se resuelva para bien, tanto para él como para el entrenador, porque todos queremos la tranquilidad y el camino libre como para poder jugar y trabajar”, señaló el zaguero paraguayo. Por su parte, Jesús Dátolo se expresó en términos parecidos. “A uno no le gusta ver a un compañero en esta situación, más cuando hemos vivido muchas cosas lindas”, comentó el mediocampista de Banfield. “Pero la verdad, esto nos pone muy tristes. Las cosas se dieron así. El tiene que tratar de arreglar sus cosas. Lógicamente es una situación difícil para él y su familia”, indicó Dátolo. Por el momento, ninguno de los principales referentes del equipo se pronunció sobre la situación.