Argentina se adjudicó el Grupo B del Mundial con una actuación destacada de los jugadores que no habían tenido mucha participación. Entre ellos, Clemente Rodríguez en primer lugar, y Javier Pastore en segundo orden, fueron los que más se destacaron en el triunfo ante los griegos. El ex Boca aportó una variante interesante como lateral por la izquierda, ofreciendo algo que no se había visto en los dos partidos anteriores: desborde por los costados. Por su parte, el ex Huracán ingresó en la segunda mitad y participó del circuito creativo con mucha tranquilidad.

- Romero (6): no fue exigido con seriedad en el primer tiempo, y cuando salió para anticipar lo hizo con corrección, sobre todo en los envíos aéreos. En el complemento, respondió bien ante un tiro de media distancia, en la más clara que tuvieron los griegos en el segundo tiempo. Sigue siendo uno de los hombres más seguros del equipo.

- Otamendi (5): se proyectó por su lateral y provocó riesgo en una de esas acciones. Tuvo algún inconveniente con la marca de Samaras cuando éste se recostó sobre ese lado. Bajó su rendimiento en el segundo tiempo y no apareció tanto.

- Demichelis (5): volvió a cometer un error que casi le cuesta otro gol al equipo, pero Samaras definió desviado. Se reivindicó en el final convirtiendo el primer gol luego de un rebote en Milito, definiendo de zurda en el área chica. De todas maneras, continúa con irregularidad en un sector clave.

- Burdisso (6): exhibió seguridad y eligió salir jugando por abajo. El más firme de los dos centrales. Quedó claro que es la mejor alternativa en ese sector, ante la ausencia de Samuel o el propio Demichelis.

- C. Rodríguez (8): uno de los mejores de la Argentina. Se mostró como salida por su lateral, y se asoció bien con Maximiliano Rodríguez para llegar al área rival. En una de sus incursiones, probó al arco y la pelota salió cerca del palo. Sorprendió por la soltura en su debut mundialista.

- M. Rodríguez (5): no tuvo mucho despliegue por su franja y careció de espacios para poder imprimir su ritmo habitual. En el final del primer tiempo tuvo una chance para convertir, y su remate al arco dentro del área, luego de un rebote, fue rechazado por el arquero.

- Bolatti (6): se paró en el centro del mediocampo. Distribuyó la pelota con acierto hacia ambos costados, buscando generalmente a Verón. Igualmente, en algunos momentos pareció “molestarse” con el jugador de Estudiantes en relación con la ubicación en esa zona. Estuvo cerca de convertir pegándole desde el área chica y Tzorvas atrapó la pelota.

- Verón (5): se fue convirtiendo en el organizador del juego a medida que pasaban los minutos, pero no se pudo consolidar del todo. Cuando se juntó con Messi armaron jugadas de peligro. Tuvo una chance para convertir con un tiro de lejos, luego de un rebote, y el arquero la sacó por arriba.

- Messi (6): trató de transformarse en el conductor, pero tuvo que lidiar con la marca constante de Socratis, y sobresalió con jugadas aisladas con su sello característico. Estuvo cerca de marcar en el final del primer tiempo y Tzorvas alcanzó a sacar por arriba. Luego probó de tiro libre y respondió el arquero. En el final, encaró por la izquierda, dejó un hombre en el camino y su remate se estrelló en el palo.

- Milito (5): se lo vio desconectado del resto y le costó encontrar los espacios para quedar de frente al arco. Ofreció esfuerzo y sacrificio pero poca claridad en los últimos metros.

- Agüero (5): tampoco tuvo profundidad para desnivelar. Pareció que podía desequilibrar cuando a los 17 minutos encaró por la izquierda, dejó tres en el camino y el tiro fue rechazado por el arquero. Pero después tuvo poca incidencia. Volvió a tener una chance muy clara para convertir en el primer tiempo, pero Vintra llegó justo para cruzar y mandar la pelota al corner.

- Di María: se ubicó por la izquierda y combinó bien con Clemente Rodríguez, pero falló cuando quiso gambetear por el medio.

- Pastore: se paró sobre la derecha del mediocampo y buscó asociarse con Verón. Volvió a mostrar el mismo atrevimiento que ante Canadá, en el amistoso previo a la Copa del Mundo.

- Palermo: para introducir un nuevo capítulo en su trayectoria particular, marcó el segundo gol con un tiro cruzado de derecha, luego de un rebote del arquero por un zurdazo de Messi. Antes, había rematado al arco, de zurda, pero sin dirección.